El abandono del dólar estadounidense por Moscú y Pekín podría resultar en la creación de una «alianza financiera», según un importante analista ruso. Alexey Maslov cree que la asociación se acerca a un «momento decisivo».
Maslov, director del Instituto de Estudios del Lejano Oriente de la Academia de Ciencias de Rusia, predice que la «desdolarización» de Rusia y China podría llevar a las dos naciones a formar una alianza fiscal de facto.
“La colaboración entre Rusia y China en el ámbito financiero nos dice que finalmente están encontrando los parámetros para una nueva alianza entre ellos”, dijo en declaraciones a la publicación japonesa Nikkei Asian Review.
En 2015, la participación de la moneda estadounidense en las transacciones bilaterales entre Rusia y China era del 90 por ciento, y ahora se sitúa en solo el 46 por ciento. La brecha se ha llenado con el comercio en euros (30 por ciento) y las monedas nacionales de los dos países (24 por ciento). La proporción de euros, rublos y yuanes está en su punto más alto.
Muchos esperaban que esto fuera una alianza militar o una alianza comercial, pero ahora la alianza se está moviendo más en la dirección bancaria y financiera, y eso es lo que puede garantizar la independencia de ambos países ”, dijo Maslov.
La política de desdolarización de Rusia comenzó en 2014, como resultado de que las naciones occidentales impongan sanciones a Moscú por su reunificación con Crimea. China se unió a un alejamiento del dólar unos años después, cuando el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró una guerra comercial contra Beijing.
En 2014, Rusia y China acordaron permitir el acceso directo a las monedas de cada uno, firmando un acuerdo de intercambio de divisas por valor de 150 mil millones de yuanes ($ 21,5 mil millones). Desde entonces, el Banco Central de Rusia ha reducido sus activos en dólares a más de la mitad y adquirió una cuarta parte de las reservas mundiales de yuanes.