Turquía: Popularidad de Erdogan decrece en medio de cuestionamientos por el desempleo y el coronavirus


Un sondeo publicado hoy por la empresa Avrasya Research Company refleja el descontento popular con la gestión del presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, cuestionado ahora por su política para enfrentar la Covid-19.

Según la encuesta el 46,8 por ciento de los consultados declinaría votar por el actual mandatario si se presenta como candidato en las elecciones del 2023; el 38,9 por ciento aprueba su gestión, mientras el 14,3 se mostró indeciso.

Los resultaron afloran en medio de acusaciones contra el Ejecutivo por parte de la Asociación de Médicos de Turquía, quienes afirman que el Gobierno oculta los datos reales sobre la incidencia de la Covid-19 en el país.

Sinan Adiyaman, presidente de la Asociación declaró al diario local Sozcu que el Ministerio de Sanidad limita los test para detectar el virus SARS-CoV-2, causante de la enfermedad, solo a personas que tuvieron contacto con pacientes infectados.

Si baja el número de test, baja el número de nuevos infectados, denunció Adiyaman quien afirmó además que en algunas ciudades los pacientes regresaron a sus casas porque no existe disponibilidad de camas en los centros hospitalarios.

El total de casos reportados como positivos al SARS-CoV-2 asciende a 231 mil 869 según estadísticas oficiales, mientras que el número de fallecidos es de cinco mil 717.

Otros criterios advierten sobre rebrotes de la enfermedad que pudieran surgir en los próximos días debido a la Fiesta del Sacrificio (Aid al-Adha) efectuada este fin de semana.

Esta festividad conmemora un pasaje recogido en el Corán, en el que se muestra la voluntad de Abraham (Ibrahim para el mundo cristiano) de sacrificar a su hijo Ismael (Isaac) como un acto de obediencia a Dios.

El doctor Yilmaz Kurt declaró a la prensa local que el actual aumento de casos en el país responde a una masiva ceremonia religiosa efectuada el 24 de julio en Estambul, cuando decenas de miles de personas se congregaron frente a la antigua Basílica de Santa Sofía durante el primer rezo tras su reconversión en mezquita. La decisión de cambiar el estatus del templo, que funcionó como museo durante 86 años, recibió críticas dentro y fuera del país y es calificado por analistas como un intento de Erdogan por recuperar el apoyo popular.

Entre las preocupaciones de los votantes están el desempleo, el alto costo de la vida y otros temas relativos a la economía interna, según el sondeo.

En 2016, tras el fallido golpe de estado dirigido desde el exilio por el clérigo Fethullah Gulen, Erdogan gozaba de un 67 por ciento de apoyo popular, cifra que a principios de año se ubicó en 45 por ciento.

No obstante el oficialista partido de la Justicia y el Desarrollo se mantiene a la cabeza en la intención de voto con 35 por ciento, pero cinco puntos menos que en enero pasado.

Fuente