El asesor de seguridad nacional del presidente de Estados Unidos, Robert O’Brien, dijo que si se confirman los informes sobre los supuestos pagos ordenados por Rusia a los talibanes, Moscú lo pagará.
«Si los informes recientes de actividades malignas rusas hacia los estadounidenses en Afganistán demuestran ser ciertos, Rusia sabe por experiencia que pagará un precio, incluso si ese precio nunca se hace público», dijo O’Brien en su artículo publicado por The Washington Post.
Anteriormente, The New York Times, citando a funcionarios estadounidenses no identificados, informó que la inteligencia militar rusa supuestamente ofreció a los combatientes talibanes una recompensa por los ataques contra las tropas estadounidenses en Afganistán. Según el periódico, esto supuestamente tuvo lugar en medio de negociaciones sobre una solución pacífica del conflicto afgano.
O’Brien también habló sobre las áreas de cooperación potencial entre Rusia y los Estados Unidos. Esto, en su opinión, es un acuerdo trilateral de control de armas que involucra a China y la lucha contra el terrorismo.
“En junio, Estados Unidos comenzó negociaciones con Rusia sobre un nuevo Tratado Start (Tratado de Armas Ofensivas Estratégicas).
Estados Unidos es cautelosamente optimista de que podemos llegar a un acuerdo con Moscú y China sobre un marco de control de armas que se centre en restricciones verificables sobre todo tipo de armas nucleares”, escribió el asesor.
Agregó que el 23 de julio, el presidente estadounidense Donald Trump y el líder ruso Vladimir Putin tuvieron una conversación durante la cual ambos líderes prometieron hacer todo lo posible para prolongar el Tratado Start y hacerlo aún mejor.
“Otra área de cooperación potencial con Rusia es la lucha contra el terrorismo. Tanto Rusia como Estados Unidos han sido atacados por extremistas violentos en sus países de origen. Es probable que los funcionarios estadounidenses interactúen con sus homólogos rusos de inteligencia y aplicación de la ley en estos temas en los próximos meses”, dijo O’Brien.
En conclusión, el asesor del presidente de Estados Unidos dijo que Trump está buscando ese camino en las relaciones entre Estados Unidos y la Federación de Rusia, «según el cual Rusia se abstiene de la agresión en el extranjero y se convierte en un socio amistoso para Estados Unidos y Europa».
“En un mundo así, las sanciones contra Rusia serían innecesarias y el comercio entre nuestros países florecería. Los rusos, los estadounidenses y el mundo entero se beneficiarían de esa relación”, concluyó.