Los manifestantes en Seattle se enfrentaron con los oficiales, destrozaron varios edificios y prendieron fuego a un sitio de construcción para un centro de detención juvenil del condado, obligando a la policía local a declarar un motín debido a «riesgos de seguridad pública».
Después de que un grupo de manifestantes incendió el sitio de construcción de las instalaciones del Condado de King, la policía emitió «órdenes de dispersión» y se vio obligado a desplegar «municiones menos letales» para despejar el área y asegurar el acceso al fuego para el departamento de bomberos de la ciudad
Direct clashes here between protesters and police.
As far as I can see, they are all local cops. pic.twitter.com/BM6LU5Cdk4
— Mike Baker (@ByMikeBaker) July 25, 2020
Los agentes fueron arrojados con piedras, botellas, globos llenos de líquido y otros proyectiles, así como «algún tipo de explosivos», dijo en Twitter el Departamento de Policía de Seattle.
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Seattle right now. This isn’t peaceful. pic.twitter.com/r4eudk9USX
— Jason Rantz on KTTH Radio (@jasonrantz) July 26, 2020
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Seattle ha visto numerosas protestas desde la muerte de George Floyd en un intento fallido de arresto en mayo. La ciudad también fue sede de la ahora difunta «zona autónoma» en su vecindario de Capitol Hill, que luego se disolvió luego de una serie de violencia y varias muertes.
La protesta de este fin de semana en Seattle se lleva a cabo en una muestra de solidaridad con Portland, donde las protestas contra la brutalidad policial continúan durante casi dos meses, estallando habitualmente en enfrentamientos con los oficiales federales.
Esta semana, la administración Trump amplió el despliegue de la policía federal en Seattle, para contener la posible violencia, después de que una ordenanza local prohibió a la policía usar armas de control de multitudes. Sin embargo, en una decisión de último minuto, un juez federal revocó la prohibición de usar spray de pimienta, bolas explosivas y otras armas de control de multitudes, luego de que el jefe de policía de la ciudad dijera que la fuerza sería impotente para detener la violencia de la mafia.