El caza furtivo chino J-20 entró en servicio con la Fuerza Aérea del Ejército Popular de Liberación de China, y surgieron numerosos informes que indicaban que Estados Unidos había perdido su ventaja en el campo de sigilo del avión.
Según el sitio web de National Interest, aunque el J-20 convierte a China en uno de los primeros países en desarrollar sus propios cazas sigilosos, el avión aún necesita muchas modificaciones.
Una de las características más destacadas del J-20 son los canards, que son pequeñas superficies de control en forma de ala cerca de la cabina.
Aunque el candard no corresponde necesariamente a diseños ocultos, también proporciona a los operadores de radar otra superficie que puede reflejar la potencia del radar lejos de la célula y amplificar su firma de radar.
Sin embargo, el J-20 carece de una maniobrabilidad superior debido a las boquillas de escape convencionales y los motores débiles.
«En última instancia, la nueva variante del J-20 de fabricación china, el J-20B, está diseñada para estar equipada con potentes motores WS-15 diseñados por los chinos que ofrecerían un mayor rendimiento, probablemente una mejor eficiencia de combustible y un vuelo a mayor sobre altitud. Pero debido a que la producción del nuevo motor está retrasada, China ha optado por un diseño extranjero hecho en Rusia”, dijo National Interest.
Si bien la Fuerza Aérea China, sin duda, preferirá no depender de motores de fuentes externas, el motor «AL-31» de diseño ruso proporciona un impulso superior y mejora las características del J-20.