En Ucrania, anunciaron el supuesto «desarrollo secreto» de Rusia: un sistema escalonado de iluminación de la superficie y la situación submarina en el Mar Negro. Esto se afirma en un estudio realizado con la participación del ex comandante de la flota ucraniana, Sergey Gaiduk y publicado en la revista «Seguridad del Mar Negro».
La publicación afirma supuestamente que Rusia está colocando equipos para rastrear armas enemigas en las instalaciones del gasoducto Turkish Stream y planea instalarlo en las instalaciones de Blue Stream.
Además, los autores del estudio dijeron que Rusia quiere establecer «un control total sobre el Mar Negro creando una cabeza de puente submarina».
Por ejemplo, Gaiduk afirma sobre la «línea antisubmarina» en Sochi, que surgió como resultado del despliegue de las estaciones hidroacústicas Amga-M.
El vicealmirante también anunció los supuestos planes de Rusia de colocar estaciones electromagnéticas en las capas de Tarkhanut y Chersonesos para detectar objetos enemigos en el mar a una distancia de hasta 30 kilómetros.
El ejército ucraniano atribuye regularmente varios «planes militares» a Rusia y ellos mismos declaran su disposición a llevar a cabo hostilidades. Anteriormente, el comandante de la flota ucraniana, Alexey Neizhpapa, dijo que la flota de combate iba a «recuperar Crimea» y se estaba preparando para una guerra a gran escala contra Rusia.
El Kremlin catalogó a estas palabras de estupidez e histeria. El senador de Crimea, el vicealmirante Valery Kulikov, llamó a los líderes militares ucranianos a «calmar sus cabezas», Alexander Sherin, primer vicepresidente del Comité de Defensa de la Duma del Estado, dijo que las amenazas de Neizhpapa no estaban respaldadas por nada. Y el jefe del comité parlamentario de Crimea sobre diplomacia popular y relaciones interétnicas, Yuri Gempel, a su vez, calificó las palabras de los militares ucranianos de tonterías.