El 12 de julio tuvo lugar la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de Polonia. El actual presidente Andrzej Duda, en representación del Partido de la Ley y la Justicia, ganó la segunda vuelta con el 51% de los votos, mientras que su oponente del partido opositor de la Plataforma Cívica, el alcalde de Varsovia, Rafal Trzaskowski, quedó en segundo lugar con el 49%. A raíz de esto, representantes de la oposición presentaron un reclamo ante la Corte Suprema de Polonia en un intento de impugnar el resultado de las elecciones, informa Vedomosti.
El líder del partido de la Plataforma Cívica, Borys Budka, afirmó que la elección no estaba a la altura de los estándares democráticos, porque el presidente había recibido un apoyo activo del gobierno.
Hubo violaciones graves durante las elecciones, sin embargo, el problema principal no está relacionado con la mala organización y otros percances, dijo a Vedomosti Investigador Principal del Instituto de Economía Mundial y Relaciones Internacionales (IMEMO) de la Academia de Ciencias de Rusia, Dimitri Ofitserov-Belsky. El sistema electoral había sufrido una transformación planificada antes de la votación, explicó. «Un gran número de personas en el extranjero no pudo emitir su voto. No es un secreto en Polonia que los polacos que viven en el extranjero son más liberales, y es poco probable que voten por el Partido de la Ley y la Justicia. Varios cientos de miles de personas no pudieron votar, es por eso que la victoria de Duda es algo controvertida: en algunos países, quienes expresaron su deseo de votar se enfrentaron a una falta de papeletas, y en algunos estados, las embajadas fueron cerradas el día de las elecciones, señala el experto.
«En cualquier caso, Ley y Justicia no tiene la intención de reaccionar a las críticas nacionales o extranjeras. Lucharán hasta el final, como lo habían planeado desde el principio y esperaban una respuesta», dijo Ofitserov-Belsky. Según él, a pesar de una visión negativa de la Ley y la Justicia de Bruselas y Berlín, no se enfrentarán con los representantes del partido, sino que buscarán una cooperación constructiva.