El Partido «Comunistas de Rusia» creen que los rusos deberían negarse a viajar a Turquía después de la decisión de las autoridades del país de hacer de Hagia Sophia en Estambul una mezquita en funcionamiento, informa el servicio de prensa del partido.
El 10 de julio, el Consejo de Estado turco, el tribunal administrativo más alto del país, anuló la decisión de 1934 de convertir a Santa Sofía en un museo. Inmediatamente después de esto, el presidente turco, Tayyip Erdogan, anunció que había firmado un decreto para convertir la catedral en una mezquita y comenzar los servicios musulmanes allí.
«Como comunista y ciudadano de un país con más de mil años de historia, expresando la opinión de muchos comunistas de mi partido, insto a los rusos a rechazar viajes a Turquía hasta que las autoridades de este país devuelvan el estatus de museo a la catedral», citó el servicio de prensa al vicepresidente del Comité Central del Partido, Yaroslav Sidorov.
En su opinión, las autoridades turcas no tomaron en cuenta los repetidos llamamientos de las organizaciones religiosas, culturales, científicas y humanitarias rusas y de otro tipo, y ante estas acciones «las autoridades y el público de Rusia deben dar una respuesta decisiva, tanto laica como religiosa».