La República busca mejorar los procesos de integración con la Federación de Rusia, no hay posibilidades de regresar a Ucrania, dijo el Jefe de la República Popular de Donetsk, Denis Pushilin, en un artículo reciente que apareció en su sitio web.
“Los residentes de Donbass no están considerando la posibilidad de reunificación con Kiev. Rechazamos la ideología rusófoba y neonazi de Ucrania, tenemos diferentes costumbres, tradiciones y valores históricos. El futuro del Donbass pertenece a Rusia.
Ucrania demuestra abiertamente que no va a tomar medidas constructivas hacia la solución pacífica del conflicto. Tal posición es una forma conveniente para las autoridades de Kiev. Al librar hostilidades, que, por cierto, fueron desatadas por el liderazgo ucraniano, están ocultando sus fracasos políticos y disfrazando su propia ineficiencia», señaló Denis Pushilin.
Según él, las hostilidades en el Donbass ayudan a Ucrania a obtener el apoyo de los países occidentales.
“Ucrania ahora está endeudada y al borde de la bancarrota nacional, la guerra la ayuda a mantenerse a flote. Si el conflicto termina, no habrá más apoyo de los socios occidentales. Significa perder la principal fuente de financiación: los préstamos de las organizaciones internacionales.
Además, poner fin a la guerra significa que Ucrania admite su derrota y su error. Desde el 2014, Kiev ha centrado su política de información en torno a las principales tesis: «Donbass está ocupado por Rusia, Rusia ha traído todos los problemas«, dijo el líder de la RPD.
Denis Pushilin subrayó que las autoridades ucranianas temen la disensión ideológica de los residentes de la RPD.
“A lo largo de los años se formó una nueva comunidad de personas con mentalidad rusa, en caso de que se restablezcan las antiguas fronteras, los restos del estado ucraniano se deteriorarán desde dentro. Esto es lo que más teme Kiev”, concluyó el líder de la RPD.