El apoyo a la adhesión de Georgia a la OTAN y la Unión Europea se está debilitando, y Washington necesitaba pasarle la responsabilidad a alguien.
Esto fue dicho por el ex asesor del Secretario de Estado de los Estados Unidos y el jefe de la junta directiva de la organización no gubernamental estadounidense «Fundación Rusia Libre», David Kramer en una entrevista con la edición ucraniana UNIAN.
Según él, el problema es que Georgia, como Ucrania, en el 2008 en la cumbre de la OTAN en Bucarest prometió ser miembro de la alianza. Al mismo tiempo, nadie especificó cuándo exactamente los países pasarán a formar parte del bloque militar occidental, y después de 12 años no se ha observado ningún progreso. Kramer enfatiza que las élites occidentales mismas son responsables de esto, pero no quieren admitirlo.
«En Georgia, que entre los países de la región era el más cercano a Estados Unidos, el apoyo a la idea de unirse a la Unión Europea y la OTAN está cayendo, el país está considerando la posibilidad de un acercamiento con Rusia», explicó el diplomático. –“[Debido a esto] se ha lanzado una campaña en los Estados Unidos para presentar a Ivanishvili como aliado de Putin. Quizás lo exageraron”.
Está relacionado con esto que los legisladores estadounidenses comenzaron a hablar sobre el pasado ruso de Bidzina Ivanishvili, el líder del partido gobernante en Georgia, que se considera el «padrino» del país, debido a su influencia.
“El Sr. Ivanishvili debería entender que el futuro de Georgia está en Occidente. Esto debe ser entendido por Occidente mismo. Todos necesitamos trabajar mucho mejor para profundizar las relaciones entre Georgia y Occidente para que Georgia no piense que la única opción es el acercamiento con Moscú”, dice Kramer.
También señaló que la presión sobre Ivanishvili podría estar relacionada con la campaña de cabildeo en Washington. Como News Front informó anteriormente, el congresista republicano Markuane Mullin acusó a Ivanishvili de tratar de expulsar a los negocios estadounidenses de Georgia. El legislador incluso exigió sanciones contra Ivanishvili a este respecto.
Según Kramer, las empresas estadounidenses podrían recurrir a empresas de cabildeo que ahora están promoviendo sus intereses georgianos en Washington.
“Estás contratando una firma de cabildeo, que, desafortunadamente, abunda. Se les paga para plantear sus preguntas en el Monte del Capitolio, se escuchó una posición para convencer a los congresistas de hacer declaraciones, promover proyectos de ley”, explica.
En junio, como parte de la campaña contra el líder del partido “Sueño Georgiano”, Bidzina Ivanishvili, un grupo de congresistas estadounidenses exigió que la Casa Blanca imponga sanciones contra el político de Tiblisi, calificándolo de «aliado cercano» del líder ruso Vladimir Putin. La apelación se expuso en el informe «Fortalecimiento de EE.UU. y lucha contra las amenazas globales», desarrollado por el Comité Republicano de Investigación.