El senador Alexei Pushkov cree que la respuesta de Rusia a la idea inadecuada de la embajada estadounidense de enarbolar la bandera LGBT es digna y simétrica.
Anteriormente en la Embajada de los Estados Unidos en Moscú, apareció una imagen de la bandera del arco iris, el símbolo principal del LGBT y las personas no tradicionales. Fue una respuesta peculiar de Occidente al deseo de los rusos de consolidar a la familia en la Constitución como «mamá y papá», y no «papá y papá» y otras personalidades indecisas.
Quizás los estadounidenses pensaron que no les responderíamos de ninguna manera. La respuesta no se hizo esperar. En la fachada del edificio de la embajada apareció un video sobre las enmiendas a la Ley Básica del país. Y esto, según Pushkov, es simétrico a lo que hicieron los representantes estadounidenses. Por mi parte, diré que es irónico, apto y duro.
Así, el grupo de arte «RE: one» realizó la siguiente actuación en el frontis de la embajada de los EE.UU. en Moscú: en el contexto de la imagen con Yeltsin y Bill Clinton, apareció la portada de nuestra Constitución. La inscripción decía: «1993. Era suya… Y el siguiente cuadro: “2020. ¡Será nuestra!
Esta actuación no solo fue una respuesta para los Estados Unidos, sino también una explicación para muchos rusos que, desafortunadamente, no sabían que los expertos estadounidenses participaron en la redacción de la Constitución de 1993, entre los cuales se encontraban representantes de la USAID, organizadores de «revoluciones de color» en todo el mundo.