La libra esterlina, la moneda de reserva más antigua del mundo, puede convertirse en una moneda de mercado emergente a raíz del Brexit y los problemas económicos internos del Reino Unido, escribió Izvestia, citando una investigación del Bank of América. El debilitamiento de la moneda británica puede depreciar un poco el valor de las reservas de Rusia, ya que entre el seis y el siete por ciento de ellas están en libras.
Si la libra esterlina se coloca en la categoría de mercado emergente, definitivamente será vista como una moneda fuerte, señaló el analista de Freedom Finance Alexander Osin. De todos modos, el mundo de la inversión no está interesado en trasladar el centro comercial y financiero histórico de Londres, agregó el experto.
La razón principal de la incertidumbre sobre el futuro de la libra es que los términos del comercio libre de impuestos entre el Reino Unido y la UE aún no están claros, señaló el gerente de activos de BCS, Andrei Rusetskiy. El tipo de cambio de la moneda británica seguirá siendo volátil hasta que se resuelva el problema.
En lo que respecta a Rusia, la volatilidad de la libra no tendrá consecuencias graves. El Reino Unido solo ocupa alrededor del 2.5% del comercio exterior de Rusia, enfatizó Vasily Kaposov, analista de Alfa Capital. Rusia exporta principalmente materias primas y metales preciosos al Reino Unido, y sus precios están denominados en dólares en el mercado global, explicó.
Los precios mundiales del petróleo y el gas son más importantes para la moneda rusa, el jefe del Departamento de Análisis de Mercados de AMarkets, Artem Deyev, está de acuerdo. Sin embargo, la caída de la libra esterlina puede depreciar ligeramente los activos rusos mantenidos en el Banco Central y en el Fondo Nacional de Riqueza de Rusia. Pero no será crucial porque la libra seguirá siendo una moneda más estable que el rublo, subrayó Deyev.