La Cancillería venezolana denuncia los embargos de Estados Unidos contra los capitanes de cinco buques iraníes, tildando la medida de “un derroche de soberbia”.
El secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, anunció el miércoles que el Gobierno del presidente norteamericano, Donald Trump, ha dispuesto sanciones contra los capitanes de los cinco buques iraníes que, en mayo, bajo amenazas de Washington, transportaron gasolina al país caribeño.
En este sentido, el canciller de Venezuela, Jorge Arreaza, mediante un mensaje publicado la misma jornada en Twitter, tachando de “un derroche de soberbia” las medidas de Washington contra la nación bolivariana, manifestó que “esta es otra prueba del odio de los halcones de Trump contra todos los venezolanos, más allá de sus posiciones políticas”.
Además, el jede de la Diplomacia venezolana aseguró que elevará este caso a la Corte Penal Internacional (CPI) de La Haya.
La República Islámica de Irán, como uno de los grandes productores y exportadores de crudo a nivel mundial, envió cinco buques cisterna a Venezuela, llamados Clavel, Petunia, Fortune, Forest y Faxon, cargados de 1,53 millones de barriles de gasolina y aditivos petroleros, a fin de paliar la gran escasez de combustible que sufre la nación bolivariana a raíz de las sanciones ilegales impuestas por la Administración de Trump.
Después de la llegada de los buques de gasolina, el país persa, en el marco de la alianza entre Teherán-Caracas, envió, este junio, un cargamento de alimentos a Venezuela para inaugurar el primer supermercado iraní en el país caribeño.
Las sanciones de la Casa Blanca, que tienen como objetivo derrocar el Gobierno del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, han afectado a las importaciones de alimentos, fármacos y equipos médicos, con lo que ponen en peligro la vida de miles de venezolanos, especialmente ahora, en medio de la pandemia del nuevo coronavirus, causante de la COVID-19.