La economía rusa se está moviendo hacia una recuperación a medida que las restricciones relacionadas con el coronavirus se están levantando gradualmente, pero, hasta ahora, la economía se tambalea entre un crecimiento débil y una nueva recesión, señalan los expertos entrevistados por Vedomosti.
A mediados de junio, se había observado una tendencia positiva entre las empresas y los consumidores rusos. Los flujos financieros entrantes (analizados por el Banco Central de Rusia) se han estabilizado, aunque a un nivel bastante bajo. A principios de junio, fueron 12.3% más bajos que la norma, mientras que en la segunda semana de junio, la disminución se reportó en 10.7%. La situación con el ahorro de las personas también ha mejorado ligeramente, con un crecimiento de los depósitos del 1,4%. El ánimo entre las empresas rusas está mejorando. La mayoría de las empresas encuestadas por el Banco Central planean restaurar la producción a niveles anteriores a la crisis o incluso superarla. La proporción de empresas que enfrentan una interrupción de los suministros ha disminuido. La situación se está estabilizando, sin embargo, hasta ahora, no hay suficientes datos para ver qué tan confiable es esta recuperación, advirtió Vladimir Tikhomirov, economista jefe de BCS Global Markets, en una entrevista con Vedomosti.
El experto económico señaló que es poco probable que la leve política financiera y crediticia del Banco Central, que incluye bajar la tasa clave, impulse el crecimiento. Tirar dinero al problema no puede solucionar la caída de la demanda y la baja solvencia de la población. Bajar la tasa clave puede ayudar a los prestatarios y aliviar su deuda, pero es poco probable que esta medida aumente la demanda.
Tikhomirov dijo al periódico que lo único que puede sacar a la economía rusa de la crisis es un repunte económico global. Los economistas del Banco Uralsib comparten su opinión y señalan que la recuperación de la economía mundial será un factor clave en el crecimiento de la economía rusa. Sin embargo, la situación inestable en todo el mundo causada por la pandemia de COVID-19 obstaculizará la actividad comercial mundial, lo que podría conducir a una recesión total, dijeron a Izvestia analistas del Centro de la Escuela Superior de Desarrollo Económico de Rusia, y agregó que la recuperación de la economía global podría tomar mucho tiempo.