Este 23 de junio se cumplen cuatro años del proceso electoral que avaló la salida de la nación británica del bloque comercial de Europa.
El denominado brexit como se identifica la salida de Reino Unido de la Unión Europea, inició con la promesa electoral del ex primer ministro David Cameron y se consolidó con el referéndum británico celebrado el 23 de junio de 2016, dando paso al fin de 47 años de asociación con el bloque.
Desde que Reino Unido expresó a través del referendo que daría un paso fuera de la comisión, y tras invocar el artículo 50 del Tratado de la UE el 29 de marzo de 2017, han transcurrido varias negociaciones para acordar una salida que asegure los intereses de ambas partes.
El proceso de negociación ha mostrados los desacuerdos entre la nación británica y la comisión europea. Incluso llegó a plantearse la salida con o sin acuerdo del bloque.
Los encuentros trabajan en una estructura de desvinculación que abarca esencialmente las llamadas “cuatro libertades fundamentales” establecidas en el Tratado de la Unión Europea.
Libertad para el establecimiento de personas, libertad para la circulación de mercancías, libertad de capitales y libertad de servicios, son las bases que se negocian para que Reino Unido y Bruselas exista un equilibrio comercial.
Sin embargo, entre la propuesta presentada en 2019 por la ex primera ministra Theresa May, segunda autoridad británica en enfrentar el brexit, se encontraba poner fin a la libre circulación de personas, colocando en riesgo a la población migrante y prorrogando así la declaración de una fecha que finalizara de “forma organizada” la hermandad.
En medio de los cambios de autoridades tanto británicas como en los cargos dentro de la Comisión Europea, el actual primer ministro británico Boris Johnson alcanzó una mayoría parlamentaria que eliminó cualquier posibilidad de prorrogar la salida de Reino Unido de la UE.
El 31 de enero de este 2020 entró en vigor el acuerdo de retirada y dio inicio al proceso de transición que establece 11 meses para que Gran Bretaña recupere completamente su independencia económica y política de la UE, desligándose del mercado único y de la Unión Aduanera europea.
Recientemente han anunciado una nueva fase de negociaciones que pretende disminuir los riesgos de un posible descontrol arancelario y fronterizo antes de que finalice el periodo de transición.
Las conversaciones han continuado en medio de la crisis sanitaria. Pese al acuerdo de no extender el periodo de transición, autoridades indican que las conversaciones tomarán mayor intensidad durante el mes de julio, mientras que esperan avanzar en un convenio antes que finalice el 2020.
Las reuniones referentes al brexit además de debatir sobre el mercado único también evalúan la estrecha colaboración que sostiene la UE con la Organización del Tratado Atlántico Norte, entre otros compromisos pendientes de los cuales Reino Unido todavía forma parte.