Egipto tiene pleno derecho a desplegar sus fuerzas en suelo libio y lo hará en caso de que sea necesario, dijo el presidente Abdel Fattah Al-Sisi en respuesta a las declaraciones y acciones belicosas de los partidarios libios del líder turco Recep Tayyip Erdogan. Ankara ha rechazado un plan de solución pacífica en Libia, conocido como la Iniciativa de El Cairo, que contó con el apoyo de la mayoría de las organizaciones y países, incluidos Rusia y Estados Unidos, y aparentemente se prepara para una solución militar al conflicto, escribe Nezavisimaya Gazeta .
Más recientemente, después de largas batallas, las fuerzas de Fayez al-Sarraj, el primer ministro del “Gobierno de Acuerdo Nacional”, repelieron a las tropas de Khalifa Haftar de Trípoli con la ayuda de Turquía. Más tarde, el ministro del Interior del “GAN”, Fathi Bashagha, dijo que cualquier conversación con Haftar era posible solo después de la retirada del ejército nacional libio de Sirte y el distrito de Jufra. El presidente egipcio dijo que estas dos ciudades eran una línea roja, que no se puede cruzar.
«Al-Sisi no dudó en declarar al mundo entero que está interesado en evitar que Turquía ingrese al territorio de la Media Luna Petrolera [de Libia]. Ankara y El Cairo han tenido relaciones tensas durante mucho tiempo. Ahora, Turquía ha anunciado sus planes a largo plazo en Libia. Egipto ha estado confiando en el petróleo libio y su economía durante varias décadas. A pesar de la guerra civil, muchos egipcios todavía están trabajando en Libia», dijo Andrey Chuprygin, profesor titular de la Escuela de Estudios Orientales de la Escuela Superior de Economía. El escenario futuro depende de actores extranjeros, señaló el experto. Hasta ahora, solo Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos, los aliados de Al-Sisi desde hace mucho tiempo, han declarado su apoyo a su postura. Ni los Estados Unidos ni Rusia han comentado sobre la declaración del líder egipcio.
«Todos están considerando qué hacer a continuación. Pero es poco probable que los grandes actores se mantengan alejados. Casi ninguno de ellos está interesado en una guerra entre Turquía y Egipto. Este sería un conflicto importante, que Medio Oriente no ha visto desde 1967. Todos perderán al final«, advirtió el experto.