El presidente mexicano critica las leyes de España por la exoneración del rey Juan Carlos, mientras que se critica la lucha contra la corrupción en su país.
Andrés Manuel López Obrador (AMLO) lamentó el miércoles que se critique la lucha contra la corrupción en México, mientras que el Congreso de los Diputados de España declina investigar presuntas irregularidades del rey emérito Juan Carlos de Borbón. “Yo lamento lo que está pasando en España (…) no hay justicia para todos”, aseveró.
AMLO se refirió, de esta manera, al hecho de que el Congreso de los Diputados español se negara a investigar al antiguo rey por presuntamente recibir millones de dólares en sobornos de Arabia Saudí durante la construcción de una línea de ferrocarril de alta velocidad a cargo de un consorcio español; el caso aún sigue abierto en los tribunales.
“Se habla de una presunta complicidad y de un acto de corrupción y no pasa nada. Y, sin embargo, todo lo que tiene que ver con nosotros, que tiene que ver con el combate a la corrupción, es señalado y cuestionado por (el diario español) El País. Callan como momias cuando les conviene y gritan como pregoneros cuando se trata de defender intereses de grupos, intereses económicos, intereses políticos”, indicó en alusión a las recientes críticas recibidas por sus decisiones en materia de energía.
López Obrador arremetió contra las empresas españolas del sector energético, al denunciar que veían a México como “tierra de conquista” y que están detrás de una fuerte campaña en contra de su Gobierno.
El mandatario mexicano aseguró que tiene información que apunta a que la empresa española Iberdrola está promoviendo una campaña de desprestigio en su contra debido a que “está poniendo orden” ante los abusos en los precios de la energía eléctrica.
Ante esto, subrayó que su Gobierno tiene la misión de no aumentar la tarifa de la luz como antes se hacía con la gasolina e indicó que, en ese aspecto, no va a ceder. Asimismo, afirmó que está abierta la posibilidad del diálogo con la compañía española para llegar a un acuerdo, “que es lo mejor”, consideró.
La investigación abierta contra el rey emérito Juan Carlos desde 2018 se centra en “delimitar o descartar” la relevancia penal de los hechos sucedidos desde junio de 2014, es decir, momento en el que el que fuera monarca abdicó a favor de su hijo, Felipe de Borbón, y perdió la inviolabilidad que la Constitución española le otorgaba.
Las finanzas de Juan Carlos de Borbón llevan años bajo sospechas. Este asunto volvió a primera línea informativa tras diversos datos publicados por la prensa suiza y británica, provocando que la Casa Real anunciara que el actual rey español, Felipe VI, renunciaba a la herencia que podría percibir de su padre, suspendiendo también su asignación anual.
La lista de escándalos que han opacado en los últimos tiempos a la monarquía española es larga, como el caso Nóos y la condena al marido de la infanta Cristina, Iñaki Urdangarin, además del caso de la actriz Bárbara Rey.