China hace concesiones y busca un compromiso en las relaciones con Estados Unidos, pero Washington no quiere negociar con Beijing, sino está tratando de frenar el crecimiento económico y tecnológico de China, esta alineación es peligrosa, dijo el presidente del Instituto Nacional de Investigación para la Economía Mundial y las Relaciones Internacionales, Alexander Dynkin.
«¿Qué nos espera en este tiempo posterior a la crisis? Es obvio que la tendencia clave aquí es la formación de una nueva bipolaridad, esta es una degradación de las relaciones entre los EE.UU. y China…Tal desorden bipolar del sistema mundial se vuelve obvio. ¿Cuál es la razón? En 2017, después del congreso del Partido Comunista de China «China ha cambiado tanto la retórica como la política. Las afirmaciones no solo sobre el liderazgo económico sino también tecnológico han comenzado a sonar cada vez más. Casi al mismo tiempo, Estados Unidos aumentó simétricamente su énfasis en la grandeza de Estados Unidos», dijo Dynkin, hablando en la Rusia y la Conferencia Mundial” dedicado a la celebración del día de Rusia.
Según él, Washington fortaleció aún más la política de proteccionismo y comenzó a destruir consistentemente los tratados fundamentales en el campo de la estabilidad estratégica.
El experto cree que el mundo bipolar se convertirá en una consecuencia del conflicto entre Estados Unidos y China.
«¿Cuál es el contenido de esta feroz competencia? Desde mi punto de vista, China no tuvo la paciencia y 50 años. Al darse cuenta de esto, China está tratando de llegar a un acuerdo y conceder: por ejemplo, el acuerdo para reducir las restricciones comerciales, que comenzó a funcionar el 14 de febrero, incluye 198 puntos, 105 de los cuales comienzan con la frase «China debe», 88 — «las partes deben», y solo cinco contienen la frase. «Los Estados Unidos deben». Es decir, resulta que <…> el puntaje es 21: 1 a favor de la Casa Blanca«, dijo Dynkin.
Como resultado, como señaló el orador, las exportaciones chinas a los Estados Unidos cayeron un 26%, es decir, existe una clara balanza comercial.
«China está tratando de encontrar compromisos, Estados Unidos no está buscando compromisos, quieren detenerse, frenar el crecimiento de este país y no negociar. Creo que esta asimetría con la que entraremos en el mundo posterior a la crisis es lo suficientemente peligrosa», concluyó el politólogo.