Los maestros griegos protestaron contra la reforma educativa, bloqueando el tráfico en el centro de Atenas.
La manifestación fue organizada por tres sindicatos. Exigen no aprobar el proyecto de ley sobre educación, ya que es, en su opinión, «anti-educativo». En particular, los sindicatos afirman que el proyecto de ley tiene como objetivo reducir el número de docentes.
También se oponen a la disposición que permite la transmisión de clases en línea (según los autores del documento, esto ayudará a no interrumpir el proceso educativo en caso de cuarentena), ya que consideran que esto es una violación de la confidencialidad.