El presidente Vladimir Putin ordenó la creación de una base de datos nacional de información genética como parte de un importante impulso para avanzar en la investigación genética en Rusia.
La futura base de datos será una de las herramientas que Rusia quiere crear para asumir una posición de liderazgo en la industria biomédica. El gobierno lo considera crucial para mantener al país competitivo en el escenario mundial en el futuro inmediato.
El Instituto Kurchatov, que es más conocido por la investigación nuclear, se encargó de sentar las bases de la base de datos, elegir el formato de almacenamiento y crear herramientas para la búsqueda y el análisis. El instituto tiene experiencia en el manejo seguro de grandes cantidades de datos sensibles y opera varios centros de datos en toda Rusia que se utilizan para proyectos de colaboración científica.
El decreto sobre investigación genética emitido esta semana es un seguimiento de una reunión gubernamental importante sobre el tema a mediados de mayo. “Todos nos damos cuenta de lo poderosas que pueden ser las tecnologías genéticas. Es por eso que necesitamos un sistema que mantenga su uso bajo control ”, dijo Putin durante la sesión.
El presidente también ordenó un impulso en la educación de especialistas en genética y secuenciación del genoma y la producción nacional de equipos de laboratorio necesarios, así como recortes de impuestos para la investigación biomédica. Rusia también abrirá centros de investigación de genoma de clase mundial que, entre sus objetivos inmediatos, trabajarán en el desarrollo de tratamientos y vacunas para Covid-19.
Las grandes bases de datos de información genética son una herramienta útil en muchas áreas científicas, desde el rastreo de la migración histórica hasta la evaluación de la efectividad de los medicamentos en una población. Para algunos tipos de estudios, como el seguimiento de enfermedades hereditarias a nivel nacional, estas bases de datos son indispensables.
Pocos detalles sobre la base de datos nacional se han hecho públicos hasta ahora, pero podría no limitarse a los genomas humanos, según lo que se discutió en la reunión de alto nivel en mayo.
Aleksandr Blagov, director del Instituto Kurchatov, sugirió la secuenciación masiva de genomas de microbios que varias organizaciones de investigación en Rusia almacenan en sus colecciones, y ofreciendo acceso a los datos a través de la red de su instituto.