La aerolínea LATAM, con sede en Santiago de Chile, solicitó la protección por bancarrota de Estados Unidos el lunes por la noche, ya que el tráfico aéreo mundial siguió siendo mínimo durante la pandemia de COVID-19.
Según se informa, la aerolínea más grande de la región, formada por una fusión entre una aerolínea chilena y brasileña a principios de la década anterior, tenía suficiente dinero para mantenerse a flote solo unos pocos meses más.
«Si tuvieron un buen ingreso durante varios años, tal vez podrían haber aguantado un poco. Hay personas que se han sacrificado. Tengo conocidos que trabajan en LATAM y se sacrifican mucho», comentó un residente de Santiago.
Aparentemente, la aerolínea está luchando por obtener crédito y presionando a los gobiernos de América del Sur para obtener apoyo financiero, siguiendo los pasos de Lufthansa de Alemania, que recibió un rescate de 9 mil millones de euros ($ 9.9 mil millones) a principios de esta semana.
Según los informes, la compañía despidió a 1.800 empleados en los últimos días, con planes de reestructuración de emergencia.