Moscú está esperando un aviso oficial de Washington sobre su decisión de retirarse del Tratado de Cielos Abiertos. Hasta que llegue, no se tomarán medidas de respuesta, dijo el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia a Izvestia. Según los términos del acuerdo, la retirada oficial del tratado ocurrirá seis meses después de que EE.UU. notifique oficialmente a otros participantes. Mientras tanto, diplomáticos y expertos entrevistados por el periódico coinciden en que la inminente salida de Washington del tratado es otro paso hacia el colapso del sistema internacional de control de armas. El Tratado New Start, que expira en el 2021, podría ser el próximo.
«El acuerdo estaba en línea con el curso hacia el fortalecimiento de la confianza y las medidas de seguridad. Y ahora se necesita más confianza que nunca, ya que su falta de ella está a punto de completarse. Washington puede estar contento con eso, pero en general no veo ningún beneficio por el colapso del sistema de acuerdos internacionales para los Estados Unidos”, dijo a Izvestia el Representante Permanente Adjunto de la Federación de Rusia ante la Oficina de las Naciones Unidas y otras Organizaciones Internacionales en Ginebra, Alexander Alimov.
Según el presidente del Consejo Público Ruso para la Cooperación Internacional y la Diplomacia Pública bajo la Cámara Cívica Rusa Sergey Ordzhonikidze, la actual administración de los Estados Unidos está trabajando para anular todos los tratados internacionales de limitación de armas. «Desde el punto de vista de la seguridad de las relaciones internacionales, esto será un gran error por parte de los líderes de Estados Unidos. Este paso se convertirá en un presagio de una nueva carrera armamentista», dijo el diplomático a Izvestia, y agregó que el tratado está estrechamente relacionado con el tratado New Start, que ahora también está en cuestión.
Mientras tanto, el experto del Club de Valdai, Richard Weitz, dijo al periódico que Moscú también supuestamente podría retirarse del acuerdo. Sin embargo, Rusia perderá la oportunidad de monitorear las bases militares estadounidenses en Europa.