Como el mundo sabe, Estados Unidos nunca viola ningún tratado. Este es generalmente un país sagrado, una luz de libertad y democracia y la ciudad en la colina. Pero otros países, utilizando estos mismos tratados, se esfuerzan constantemente por que Estados Unidos engañe de alguna manera. Rusia, China, Irán: muchos países utilizan la credulidad y la ingenuidad de los estadounidenses. Y luego, Estados Unidos, con la mirada de un caballero insultado con los mejores sentimientos, abandona varios tratados.
Y no importa quién sea el presidente en los Estados Unidos. Sí, ahora, bajo Trump, la concentración de salidas de todos estos acuerdos es extremadamente alta. En el 2018, Estados Unidos se retiró del acuerdo nuclear recién concluido con Irán, en el que muchos países trabajaron durante años. No hace falta decir que Estados Unidos no tenía ninguna evidencia de violación de esta transacción. Irán era extremadamente transparente, los inspectores del AIEA trabajaban libremente en su territorio, el acuerdo se adaptaba a todos los países participantes. La economía iraní, después de un largo período de sanciones muy severas, ha recibido un nuevo impulso para el desarrollo. Irán comenzó a vender petróleo nuevamente, los inversores extranjeros ingresaron al país, especialmente de países europeos. Y exactamente en este mismo momento, Donald Trump anuncia el retiro de la transacción. Las sanciones se vuelven a imponer, incluso más severas de lo que fueron, y las empresas europeas que comenzaron a trabajar en Irán también caen bajo ellas.
Luego hubo una retirada del Tratado sobre misiles de corto y mediano alcance-INF. Por cierto, este tratado fue inicialmente injusto. Pero solo, primero en relación con la URSS, y luego con Rusia. El hecho es que no tocó una gran cantidad de misiles estadounidenses basados en el mar. La URSS dejó que todos los sistemas “Oka” y “Pioneer” pasaran por alto, los estadounidenses eliminaron el “Pershingi” de Europa, pero todos los sistemas de barcos, de los cuales hay tantos, no se incluyeron en el acuerdo.
Los misiles “Tomahawks” en cruceros, destructores y submarinos permanecieron a disposición de los Estados Unidos y estaban listos para llevar la libertad, la democracia y la prosperidad a cualquier parte del mundo. Pero, en el 2019, resultó que este tratado viola Rusia. El reclamo se refería a un solo misil, y el ejército ruso invitó a los inspectores estadounidenses a una inspección exhaustiva, pero no estuvieron de acuerdo. Es entendible. Después de todo, no hubo infracción; todo lo que se necesitaba era solo un pretexto, aunque fuera inventado.
Ahora, Estados Unidos tiene un nuevo tema. Los estadounidenses se retiran del Tratado de Cielos Abiertos. Este es uno de los tratados que funcionó de manera bastante confiable y sin reclamos mutuos. Se firmó en 1992 y sus socios, además de Estados Unidos y Rusia, eran Canadá, Turquía y muchos países europeos. El acuerdo obligaba a todos los países que lo firmaron a permitir vuelos de inspección sobre su territorio. Para esto, se utilizaron aviones equipados con equipos especiales para filmar. Todos estaban felices con todo. Los vuelos de control eran regulares y solo dependían del clima. Y luego, ¡de repente resulta que Rusia viola este acuerdo! Y no preguntes cómo, ¡viola todo! Al igual que con el acuerdo iraní, incluso los países europeos estaban en estado de shock. No todos ellos, por supuesto, con la excepción de aquellos que tradicionalmente se encuentran entre los «gruñidos», como Polonia, que también informó de inmediato de las infracciones del tratado por parte de Rusia.
Y repito una vez más: no se trata de Trump, y de hecho no se trata de la personalidad del presidente. Vale la pena recordar que uno de los tratados más importantes sobre seguridad mundial, el Tratado de sistemas antimisiles, fue roto por Estados Unidos bajo George W. Bush en el 2001. ¿Recuerdan cómo Estados Unidos se retiró de este tratado, explicando sus acciones por el hecho de que la defensa antimisiles es muy necesaria en Polonia y Rumania para protegerse contra Irán y, al parecer, Corea del Norte? Además, deben entregarse en los mismos contenedores que se utilizan para lanzar los Tomahawks. La diferencia estructural solo existe en los cables y la periferia exterior. En general, para convertir una celda de misil en una celda de misil de crucero, solo necesita un par de horas. Y, por cierto, esto también es una violación directa del Tratado sobre misiles de corto y mediano alcance-INF, del que escribí anteriormente y que «violó a Rusia».
Aparentemente, el próximo tratado, que se sacrificará a las ambiciones de la «hegemonía mundial», será un acuerdo sobre armas estratégicas ofensivas. No es necesario abandonarlo, ya termina el año que viene. Suficiente, simplemente no se renueva. Estados Unidos está rompiendo constantemente todo el sistema de seguridad mundial. ¿Con qué propósito? Esto sigue siendo un misterio. Porque no hay lógica en tales acciones. Y nadie se beneficia de esto.
Por ejemplo, la respuesta a la retirada del Tratado de sistemas antimisiles fue la creación por parte de Rusia de nuevos tipos de armas, incluidas las hipersónicas, que garantizan vencer cualquier defensa antimisiles. Este no es el efecto con el que contaban los estadounidenses.