El presidente palestino, Mahmoud Abbas, anunció en respuesta a la oferta de anexión del Valle del Jordán de Israel que pondría fin a todos los acuerdos firmados con Israel y los Estados Unidos. Según los expertos entrevistados por Nezavisimaya Gazeta, es poco probable que los acuerdos, sobre la base de los cuales la Autoridad Nacional Palestina ha existido durante más de un cuarto de siglo, se rompan. Mientras tanto, Abbas recurrió al presidente ruso, Vladimir Putin, para solicitar una conferencia sobre el tema. Rusia, una vez más, podría convertirse en un mediador en el proceso de paz, escribió el periódico.
Abbas reafirmó el compromiso palestino con el proceso de paz con Israel a través del Cuarteto de Oriente Medio, es decir, con la mediación de Rusia, la Unión Europea, los Estados Unidos y las Naciones Unidas. Además, según la embajada palestina en Rusia, Abbas recurrió a Putin con una propuesta para convocar una conferencia internacional en Moscú para desarrollar un nuevo mecanismo para resolver el conflicto israelí-palestino. «Por lo tanto, se le ofreció a Rusia el papel de mediador principal en el proceso de paz», escribió Nezavisimaya Gazeta.
Alexander Shumilin, quien dirige el Centro Europa-Medio Oriente en el Instituto de Europa de la Academia de Ciencias de Rusia, dijo al periódico que cree que la decisión de Abbas es proactiva. «Con su dramático paso, que, por supuesto, complica la situación, quiere restringir a Netanyahu hasta que la anexión ya suceda. El efecto que esto tendrá no está claro. Creo que Abbas podrá ralentizar un poco la anexión», pronosticó el experto.
Según Shumilin, el hecho de que la administración Trump haya comenzado recientemente a actuar con mucha más cautela en Medio Oriente juega a favor de Abbas. Al mismo tiempo, el experto señaló que es poco probable que Netanyahu abandone sus planes, a menos que enfrente una presión abrumadora. «Mucho depende de la reacción de los países árabes, principalmente Arabia Saudita. Trump está escuchando la opinión [del reino]«, dijo Shumilin. Mientras tanto, aunque todos los países árabes condenaron los planes de Netanyahu, nadie sugirió ninguna medida específica.