La pandemia de coronavirus sigue afectando a Estados Unidos, Polonia y el resto de Europa, y no impedirá que el ejército de Estados Unidos realice simulacros a gran escala que ocurren poco después de que Varsovia declaró a Rusia como una amenaza mortal.
Unos 4.000 miembros del servicio estadounidenses y 2.000 polacos descenderán en los terrenos del área de entrenamiento Drawsko Pomorskie en el noroeste del país, anunció el Ejército de EE. UU. Europa (USAREUR). El ejercicio masivo, del tamaño de una división, cuyo nombre en código es Allied Spirit, se lanzará el 5 de junio y durará dos semanas.
Los juegos de guerra, que también involucran a varios vehículos estadounidenses que se trasladan de Alemania, deberían haberse celebrado en mayo, pero las preocupaciones de salud pública llevaron al Pentágono a posponerlo hasta el mes siguiente.
Aún así, los planes se producen cuando la cifra total de coronavirus de los EE. UU. Se acerca a 1,4 millones, mientras que Polonia tiene más de 17,000 pacientes con Covid-19. Varsovia cerró sus fronteras en mayo, y se espera que el cierre se mantenga hasta el 12 de junio, exactamente cuando Allied Spirit estará en pleno apogeo.
Los altos mandos del ejército polaco tuvieron su caso de coronavirus más notable en marzo, cuando el general Jaroslaw Mika dio positivo después de regresar de una reunión de la OTAN sobre el ejercicio Defender Europe 20.
El ejército de los EE. UU., Que según los informes tiene más de 5.400 casos en su rango, no explicó la razón detrás de la realización de los simulacros en medio de la pandemia, y USAREUR solo prometió tomar todas las precauciones «para garantizar la salud y la protección de las fuerzas armadas participantes y la población local «.
La noticia también llega días después de que Polonia, la nación anfitriona de Allied Spirit, declarara que la «política neoimperial» de Rusia es su amenaza más grave. Supuso que los rusos están conspirando contra Europa del Este al organizar «ejercicios militares a gran escala, basados en escenarios que suponen un conflicto con los estados miembros de la OTAN».
Como era de esperar, lo que faltaba en el documento polaco fueron las propias declaraciones de Rusia de que los avances de la OTAN en la región dañan la seguridad europea y socavan la confianza entre los vecinos. Moscú ha instado constantemente al bloque a revertir la acumulación en sus fronteras, pero se reserva el derecho de responder en especie.