Un proyecto de ley sobre el castigo de los funcionarios por grosería se ha presentado a la Duma del Estado de Rusia. El documento correspondiente apareció en la base de datos electrónica de la Casa del Parlamento.
Los autores del proyecto fueron el jefe del Comité de Política de Información de la Duma Rusa, Alexander Khinshtein, y el vicepresidente del Consejo de la Federación Rusa, Andrey Turchak.
El proyecto de ley establece que por insultar a un empleado estatal o municipal puede recibir una multa administrativa por un monto de 50 a 100 mil rublos o descalificación por hasta un año.
Por una infracción reiterada, una multa de 100 a 150 mil rublos o una privación del derecho a ocupar puestos de servicio público por hasta dos años arriesgan, escribe Gazeta.ru.