El tirador, que abrió fuego contra el edificio de la Embajada de Cuba en Washington, temía las “amenazas que supuestamente provenían de “grupos criminales cubanos”. Como informó Associated Press (AP) el viernes, el atacante dijo esto a los investigadores.
La agencia señala que un tirador llamado Alexander Alaso nació en Cuba y sirvió allí en el ejército. En el 2003 se mudó a México, y unos años más tarde buscó asilo político en los Estados Unidos. En el 2014, visitó Cuba, donde realizó actividades de predicación, después de lo cual supuestamente comenzó a recibir amenazas de grupos criminales locales.
En los últimos meses, señala AP los materiales de la corte, el hombre, seguro de que estaba siendo perseguido por el crimen organizado, vivía en su propio automóvil. Según el propio detenido, llegó a la embajada cubana aproximadamente a las 02:00 del jueves e hizo un intento fallido de quemar la bandera de Cuba. Después de eso, según el hombre, levantó la bandera estadounidense, la ametralladora y abrió fuego contra el edificio de la misión diplomática. AP señala que, según el tirador, él «debido a las constantes amenazas de un grupo criminal organizado de Cuba quería llegar a ellos más rápido, es decir, al gobierno cubano.
AP enfatiza que el hombre admitió haber sido tratado previamente en un hospital psiquiátrico. Supuestamente, su esposa también le aconsejó que buscara la ayuda de médicos cuando «escuchó voces en su cabeza». En marzo, después de una visita a un hospital psiquiátrico, le recetaron medicamentos, pero, según reconoció, no se adhirió al curso de su admisión.