El 28 de abril de 1945, comenzó el asalto al Reichstag: una operación militar de las unidades del Ejército Rojo contra las tropas alemanas para apoderarse del edificio del parlamento alemán, convertido en bastión por el régimen hitleriano. Se llevó a cabo en la etapa final de la operación ofensiva de Berlín del 28 de abril al 2 de mayo de 1945 por las fuerzas de las 150° y 171° Divisiones de Infantería del 79° Cuerpo de Infantería del Tercer Ejército de Choque del Primer Frente Bielorruso. El área del Reichstag fue defendida por unos 5.000 efectivos. De estos, la guarnición del Reichstag era de aproximadamente 1.000 personas.
En preparación para repeler la ofensiva soviética, Berlín se dividió en 9 sectores de defensa.
El sector central, que incluía edificios gubernamentales, como la cancillería imperial, la Gestapo y el Reichstag, estaba bien fortificado y defendido por unidades seleccionadas de las “SS”. Fue al sector central donde los ejércitos del 1° Frente Bielorruso y el 1° Frente Ucraniano se esforzaron por abrirse paso. A medida que las tropas soviéticas se acercaban a instituciones específicas, el mando de los frentes y los ejércitos establecieron la tarea de capturar estas instalaciones.
En la tarde del 27 de abril, la tarea de dominar el Reichstag se estableció ante el 11° Cuerpo de Tanques de la Guardia del 1° Ejército de Tanques de la Guardia. Sin embargo, al día siguiente, los tanquistas no pudieron cumplirlo debido a la fuerte resistencia de las tropas alemanas.
El 3° ejército de choque, que operaba como parte del 1° Frente Bielorruso, bajo el mando de Vasily Ivanovich Kuznetsov, no tenía previsto originalmente de asaltar la parte central de la ciudad. Sin embargo, como resultado de feroces batallas de siete días, fue esta formación quien, el 28 de abril, estaba más cerca del área del Reichstag.
Antes de que las tropas avanzaran yacía otra barrera de agua: el río Spree. Sus bancos de hormigón armado de tres metros excluyeron la posibilidad de cruzarlo improvisadamente. La única forma de llegar a la costa sur fue a través del puente Moltke, que, cuando las unidades soviéticas se acercaban, fue volado por los zapadores alemanes, pero no se derrumbó, sino que solo se deformó. Los muros de hormigón armado con un espesor de un metro y una altura de aproximadamente un metro y medio bloquearon el puente desde ambos extremos. En curso del avance, no fue posible capturar el puente, ya que todos los accesos fueron disparados por ametralladoras multicapa y fuego de artillería. Se decidió realizar un nuevo asalto al puente después de una cuidadosa preparación. El poderoso fuego de artillería destruyó los puntos de disparo en los edificios en los terraplenes de Kronprinzen-ufer y Schliffen-ufer y suprimió las baterías alemanas que estaban disparando contra el puente.
En la noche del 28 de abril y en la mañana del 29 de abril, los batallones avanzados de la 171° y 150° Divisiones de Infantería bajo el mando del capitán S. A. Neustroev y el teniente mayor K. Ya. Samsonov habían cruzado a la orilla opuesta del Spree. Después del cruce, las unidades soviéticas comenzaron a luchar por el barrio ubicado al sureste del puente Moltke.
Entre otros edificios en el barrio se encontraba el edificio de la Embajada de Suiza, que daba a la plaza frente al Reichstag y era un elemento importante en el sistema general de defensa alemán. Esa misma mañana, el edificio de la embajada suiza fue despejado del enemigo por las compañías del primer teniente Pankratov y el teniente M.F. Grankin. El siguiente objetivo en el camino hacia el Reichstag fue el edificio del Ministerio del Interior, apodado por los soldados soviéticos como la “Casa de Himmler”. Era un enorme edificio de seis pisos, que ocupaba una manzana entera. El robusto edificio de piedra se adaptó aún más para la defensa. Se llevó a cabo una poderosa preparación de artillería para capturar la “Casa de Himmler” a las 7 a.m., inmediatamente después de lo cual los combatientes soviéticos se apresuraron a asaltar el edificio.
Al día siguiente, las unidades de la 150° División de Infantería lucharon por el edificio y lo tomaron al amanecer el 30 de abril. El camino hacia el Reichstag estaba abierto…Continuará.