La edición china de Renbin Ribao publicó un artículo sobre mitos que surgieron en torno a una nueva infección por coronavirus.
Uno de los mitos generalizados sobre el coronavirus fue el rumor sobre su creación en un laboratorio chino. Sin embargo, toda evidencia apunta a su origen natural.
«Un nuevo tipo de coronavirus es un nuevo tipo de coronavirus conocido por todos en las últimas décadas», señala el artículo. La OMS, según la publicación, también anunció el origen natural de COVID-19.
El mito de que surgió un nuevo tipo de coronavirus como resultado de un incidente en el Instituto de Virología de Wuhan también es popular. Sin embargo, no tiene nada que ver con el origen del COVID-19.
El laboratorio del Instituto de Virología Wuhan de la Academia de Ciencias de China tiene un nivel de protección certificado P4: es capaz de manejar los patógenos más mortales. El virus, como se señaló, no pudo escaparse del laboratorio con ese nivel de seguridad. La publicación también recordó que un investigador de este instituto en una entrevista refutó la evidencia de que el instituto es la fuente del coronavirus.
Existe un rumor generalizado de que un nuevo tipo de coronavirus es un virus chino que se origina en Wuhan. Como se señala en el artículo, el nombre oficial del virus es SARS-CoV-2. El primer caso de infección se registró en Wuhan, pero esto no significa que se convirtió en la fuente de infección. Todavía no hay una conclusión sobre la fuente exacta del virus.
También es popular el mito de que ocurrió un brote epidémico en China a mediados de noviembre. Sin embargo, como se recuerda en el artículo, las autoridades chinas recibieron un informe de neumonía el 27 de diciembre del año pasado, y se publicó una alerta epidémica el 31 de diciembre. Además, como se señaló, China notificó a sus ciudadanos, tomó medidas para controlar y prevenir la epidemia, y también notificó a la OMS sobre la situación.
La Organización Mundial de la Salud anunció el 11 de marzo una pandemia para el nuevo coronavirus. En total, se han registrado más de 2,8 millones de casos de infección en el mundo, más de 198 mil personas han muerto.