China y Estados Unidos están utilizando la pandemia de coronavirus como una herramienta en su lucha por el liderazgo global. Beijing afirma que su sistema estatal hizo posible frenar la infección y todas las acusaciones de que el alcance de la epidemia estaba oculto no son más que ficción. Sin embargo, Washington sigue presionando sus acusaciones, escribe Nezavisimaya Gazeta.
China ha enviado equipos médicos a 16 países. Más de 125 naciones y cuatro organizaciones internacionales han recibido sistemas de prueba de coronavirus, equipo de protección y equipo de Beijing. China donó $ 50 millones a la Organización Mundial de la Salud (OMS) en marzo y abril.
Daniel Lynch, profesor de la Universidad de la Ciudad de Hong Kong, cree que Beijing no se guía solo por consideraciones humanitarias. Primero, si Beijing no puede ayudar a otros países a combatir la pandemia, puede volver a golpear a China. Segundo, China busca proteger sus intereses a largo plazo en aquellos países involucrados en su proyecto “Una franja, una ruta”.
Sin embargo, Washington está haciendo todo lo posible para hacer que el mundo y el pueblo estadounidense crean que Beijing tiene la culpa de todos sus problemas. El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, y los jefes de inteligencia se están enfocando incansablemente en esto. Además, los senadores republicanos se han embarcado en el uso de ataques de propaganda contra China en la próxima carrera presidencial. El Comité Senatorial Nacional Republicano emitió un memorando enfatizando tres cosas: fue China la que desencadenó la pandemia al ocultar el brote de coronavirus, el Partido Demócrata es demasiado blando con China y es necesario imponer sanciones a China.
El investigador jefe asociado del Instituto de la Academia de Ciencias de Rusia para los estudios de Estados Unidos y Canadá, Vladimir Batyuk, dijo al periódico que «hace solo cuatro meses, todos estaban seguros de que Trump sería reelegido triunfalmente. La economía estaba en alza, y el desempleo estaba disminuyendo. Pero ahora, por un lado, la pandemia de coronavirus vino como un rayo de la nada, y por otro, una crisis económica ha seguido con una caída en el precio del petróleo que golpeó fuertemente para la economía de los Estados Unidos. Todo esto puede tener enormes consecuencias negativas para el presidente en ejercicio. Es por eso que el memorándum está dirigido a distraer a los votantes de estos problemas. Lo único que queda por hacer es culpar de todo a China», enfatizó el experto.