El 22 de abril, el ejército iraní dijo que su primer satélite militar Noor (Light) se había colocado con éxito en una órbita ubicada a 425 kilómetros (624 millas) sobre la superficie de la Tierra, utilizando un portaaviones Qassed (Envoy). El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, dudó del cumplimiento del lanzamiento con las resoluciones de la ONU.
Un satélite iraní que se lanzó el 22 de abril es incompatible con una resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, dijo el Ministerio de Relaciones Exteriores del Reino Unido en un comunicado.
«Los informes de que Irán ha llevado a cabo un lanzamiento de satélite, utilizando tecnología de misiles balísticos, son motivo de gran preocupación e inconsistentes con la Resolución 2231 del Consejo de Seguridad de la ONU», dijo un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores.
«La ONU ha pedido a Irán que no realice ninguna actividad relacionada con los misiles balísticos diseñados para ser capaces de entregar armas nucleares. Irán debe cumplir con esto», agregó el portavoz.
«Tenemos preocupaciones importantes y de larga data, junto con nuestros socios internacionales, sobre el programa de misiles balísticos de Irán, que es desestabilizador para la región y representa una amenaza para la seguridad regional», dijo.
Irán puso en órbita con éxito su primer satélite militar a principios de esta semana.
En enero de 2019, Irán no pudo colocar varios satélites en órbita. Este intento también fue condenado por algunas naciones occidentales, que creen que las acciones de Irán violan la Resolución 2231 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, aprobada en 2015 para respaldar el acuerdo nuclear con Irán.
Estados Unidos, al igual que algunas otras naciones, considera que la resolución prohíbe a Irán lanzar cohetes. Al mismo tiempo, Rusia ha enfatizado que la resolución solo llama a Irán a abstenerse de desarrollar misiles balísticos capaces de entregar armas nucleares.