La anexión del Valle del Jordán eliminaría la última oportunidad de conversaciones de paz entre israelíes y palestinos, dijo a Izvestia el embajador del Estado de Palestina en Rusia, Abdel Hafiz Nofal. Mientras tanto, la administración de Netanyahu le dijo al periódico que la anexión de estos territorios sería el objetivo clave del gobierno recién formado y que podría comenzar este julio.
El lunes, la peor crisis política de Israel que duró un año y medio finalmente llegó a su fin. Los líderes de los bloques de derecha e “izquierda”, Benjamin Netanyahu y Benny Gantz, acordaron crear el Gobierno de Unidad Nacional. El actual jefe de gobierno será el primer ministro por otro año y medio y luego entregará este cargo a Gantz para que se convierta en su suplente. Los expertos comparten la opinión de que el nuevo gobierno de coalición de Netanyahu y Gantz no durará mucho tiempo, pero actuaría como un salvavidas para el primer ministro para evitar el juicio.
La anexión real del territorio palestino podría comenzar en dos o tres meses, según el periódico. Israel no está planeando ninguna operación militar o conversaciones con los palestinos, explicó el asesor del primer ministro Ariel Bulstein. «Simplemente aplicaremos nuestra soberanía a estos territorios exactamente como lo hicimos en 1981 con los Altos del Golán. Estas tierras simplemente se convertirán en parte de Israel de jure, y ahora tienen este estatus de facto, y ya estamos controlando este territorio».
Mientras tanto, el embajador palestino en Moscú dijo al periódico que su administración rechazó el llamado «acuerdo del siglo» y pidió a las Naciones Unidas y a la comunidad internacional que ejerzan influencia sobre Israel para evitar la anexión.
«El presidente palestino Mahmoud Abbas ha pedido al presidente Vladimir Putin, la ONU y el Cuarteto de mediadores que influyan en Israel para evitar la anexión del suelo palestino. Los pasos de los israelíes serían el último clavo en el ataúd de un acuerdo pacífico», enfatizó el embajador.