Arabia Saudita puede redirigir a los petroleros con destino a los Estados Unidos si el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, decide prohibir las importaciones de petróleo del reino, informó Reuters citando fuentes.
Así, en el camino a los Estados Unidos hay alrededor de 40 millones de barriles de petróleo saudí, que deberían alcanzar la meta en las próximas semanas.
«Dos fuentes dijeron que Arabia Saudita está estudiando la cuestión de si será capaz de redirigir bienes a otros países si Estados Unidos deja de importar», escribe la agencia.
El lunes 20 de abril, Trump dijo que «analizaría» la posibilidad de detener el suministro de petróleo de Arabia Saudita a los Estados Unidos. Frank Fannon, subsecretario de estado de recursos energéticos la semana pasada, tampoco descartó la introducción de tarifas.
Los comerciantes de petróleo en Europa y Asia esperan que los sauditas intenten redirigir los buques petroleros a otros mercados, lo que ejercerá una enorme presión sobre los almacenamiento de petróleo en estas dos regiones.
Anteriormente, se informó que los medios extranjeros sugirieron que Washington podría presionar a Moscú en el tema de la producción de petróleo.