Estados Unidos ha estado investigando los orígenes de la nueva pandemia de coronavirus y el patógeno en sí mismo, dijo el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a los periodistas en la Casa Blanca.
«Lo estamos mirando, mucha gente lo está mirando. Parece que tiene sentido», dijo.
«Sucedieron muchas cosas extrañas, pero hay mucha investigación en curso, y vamos a averiguarlo», dijo Trump, cuando se le pidió que comentara sobre la probabilidad de que se filtrara el virus mortal en un laboratorio cercano de la ciudad china de Wuhan. «Todo lo que puedo decir es que, sea lo que sea, vino de China, en cualquier forma. 184 países ahora están sufriendo por eso. Y es una lástima, ¿no?»
El epidemiólogo jefe de los Estados Unidos, Anthony Fauci, a quien se le pidió que comentara la versión sobre el origen artificial del virus más tarde durante la sesión informativa, desestimó esta información.
«Recientemente hubo un estudio que podemos poner a su disposición, donde un grupo de virólogos evolucionistas altamente calificados observaron las secuencias allí, las secuencias en los murciélagos a medida que evolucionan y las mutaciones que se necesitaron para llegar al punto donde están ahora es totalmente consistente con el salto de una especie de animal a humano», dijo.
Anteriormente, el secretario de Estado de Estados Unidos, Michael Pompeo, dijo que esperaba que las autoridades chinas permitieran que expertos extranjeros ingresaran al laboratorio en Wuhan, lo que, como afirman algunos de los medios estadounidenses, podría ser el punto de partida para la infección.
Las afirmaciones de que el nuevo coronavirus fue creado artificialmente en un laboratorio carecen de fundamento, dijo el jueves 16 de abril el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Zhao Lijian, al comentar sobre los informes del canal de televisión estadounidense Fox News que afirman que un empleado del Laboratorio del Instituto de Virología de Wuhan el «paciente cero» fue “portador” del nuevo coronavirus.