La pandemia de coronavirus no obligará a Beijing a abandonar sus proyectos militares en el extranjero en un futuro próximo. Sin embargo, estas actividades se intensificarán después del 2030, Nezavisimaya Gazeta escribe citando datos proporcionados por Jane’s.
Según los expertos de Jane, durante esta década, China continuará utilizando sus recursos militares y económicos en el extranjero, en particular, para monitorear las actividades de Estados Unidos en el Medio Oriente y África. Después del 2030, es probable que China busque bases militares adicionales en el extranjero, enfatizaron.
Hasta ahora, China ha demostrado que la pandemia de coronavirus no ha afectado su política de seguridad. El 14 de abril, la Flota China informó que su portaaviones de Liaoning estaba realizando simulacros en el Mar del Sur de China. Destacó que la operación se llevó a cabo como parte de sus acciones habituales y cumplió con las leyes y normas internacionales. Sin embargo, esto puede indicar la intención de China de aumentar su presencia en la región, donde los buques de guerra estadounidenses aparecen con bastante frecuencia.
Mientras tanto, muchos expertos señalan una disminución en el nivel de las relaciones chino-estadounidenses en medio de la pandemia. «La pandemia del COVID-19 inevitablemente resultará en el deterioro de las relaciones entre Estados Unidos y China, que han estado lejos de ser perfectas recientemente», dijo al periódico el experto militar Yuri Lyamin.
«Dadas las obvias consecuencias económicas y políticas de la pandemia en todo el mundo, me abstendría de hacer pronósticos tan trascendentales. En el contexto del inevitable crecimiento de las contradicciones e inestabilidad chino-estadounidenses en el mundo, Beijing podría comenzar a fortalecerse su presencia militar más allá de sus fronteras antes del 2030», dijo.