Brasil llegó el miércoles a 28.320 casos confirmados de Covid-19, con 1.736 fallecimientos, siendo el país latinoamericano con el mayor número de contagios.
El Supremo Tribunal Federal de Brasil (STF) decidió que los gobiernos locales pueden imponer medidas restrictivas para contener la pandemia del nuevo coronavirus.
El corresponsal de teleSUR en Brasil, André Vieira, en un mensaje colocado en la red social de Twitter, consideró como una “derrota” para el presidente brasileño Jair Bolsonaro el fallo del STF, que además rechazó una solicitud del mandatario que pretendía concentrar las decisiones.
Los magistrados del STF formaron mayoría al analizar una acción interpuesta contra una medida del Gobierno de Bolsonaro que trataba de evitar medidas por parte de los estados y municipios del gigante suramericano para combatir la pandemia del Covid-19.
#Derrota para Bolsonaro
El Supremo Tribunal Federal de #Brasil decidió hoy que los gobiernos locales pueden imponer medidas restrictivas para contener el COVID-19 y rechazó una solicitud de Jair Bolsonaro que pretendia concentrar las decisiones.
📷 Adriano Machado/Reuters pic.twitter.com/TNcpUQVG2o
— André Vieira (@AndreteleSUR) April 16, 2020
Hasta el miércoles, Brasil llegó a 28.320 casos confirmados de Covid-19, con 1.736 fallecimientos, siendo el país latinoamericano con el mayor número de contagios.
A diferencia de la mayoría de los países en el mundo, Bolsonaro no llamó a una cuarentena social nacional como medida para evitar el crecimiento exponencial de contagios del coronavirus, por lo que gobiernos estatales y municipales decidieron imponer restricciones para evitar aglomeraciones.
Cinco de los nueve ministros del Supremo Tribunal Federal validaron la autonomía de los gobiernos estatales y municipales en la emisión de normas para definir el aislamiento, la cuarentena y la restricción del transporte y tránsito en las carreteras.
El fallo del STF llegó en momentos que se viven tensiones en el sector Salud brasileño después de que el secretario de Vigilancia Sanitaria del Ministerio de Salud, Wanderson de Oliveira, presentó su renuncia al cargo por diferencias con Bolsonaro en el manejo de la crisis sanitaria.
El ministro de Salud, Luiz Henrique Mandetta, sin embargo, reveló el miércoles que no aceptó la renuncia y logró convencer a De Oliveira de continuar en sus funciones.
El ministro también desmintió los rumores que circularon en los medios de comunicación sobre su presunta renuncia al cargo.
«Estamos juntos y continuamos juntos. Él dijo que salía, yo dije que no aceptaba y aquí estamos. Estamos juntos y saldremos juntos» cuando llegue el momento, expresó Mandetta en rueda de prensa ofrecida junto a De Oliveira.