Los partidos gobernantes y opositores en Japón acordaron el martes reducir los salarios de los diputados de ambas cámaras del parlamento en un 20% en solidaridad con los ciudadanos del país, que están experimentando una caída en los ingresos debido a la propagación del nuevo coronavirus. Esta medida será válida por un año, informó la agencia de noticias Kyodo.
Después de las consultas entre las partes, el proyecto de ley correspondiente se presentará de inmediato al parlamento para su aprobación, y se supone que la reducción de los pagos comenzará en mayo. «La situación en el país es extremadamente difícil», dijo a los periodistas Hiroshi Moriyama, jefe de la facción gobernante del Partido Liberal Democrático en la cámara baja del parlamento, «La gente enfrentó grandes dificultades. Es importante que el parlamento esté con la gente durante este período».
Los diputados de ambas cámaras reciben 1 millón 294 mil yenes (casi $ 12 mil) cada uno. Los fondos recibidos recortando los salarios de los parlamentarios se utilizarán para compensar y pagar a la población en relación con las pérdidas derivadas de diversas restricciones relacionadas con la propagación de la infección. Medidas similares ya se han tomado en Japón después de que el noreste de su isla principal, Honshu, fuera severamente afectado por el tsunami y el accidente de Fukushima-1 en el 2011.
En Tokio y otras seis prefecturas del país, un modo de emergencia (EM) ha estado en vigencia desde el 8 de abril. En esta área, muchos lugares de entretenimiento, bares y otros lugares concurridos están cerrados. Los gobernadores de las prefecturas determinan sus listas, y las condiciones para la implementación del modo de emergencia varían según la región. Las autoridades instan a la población a no abandonar su hogar sin una necesidad especial, pero el sistema de acceso y otras restricciones estrictas aún no se han introducido.
El número total de casos detectados de infección por coronavirus en Japón hasta ahora ha superado los 8,4 mil, incluidos pasajeros y miembros de la tripulación del crucero estadounidense Diamond Princess, que estuvo en cuarentena durante un mes en el puerto de Yokohama. Murieron 158 pacientes con coronavirus.