Hospitales del Reino Unido intentan tratar el coronavirus Covid-19 con hidroxicloroquina, el medicamento contra la malaria promocionado por Trump


Según los informes, los pacientes con coronavirus en dos hospitales del Reino Unido ahora reciben tratamiento con hidroxicloroquina. La droga, promovida por el presidente estadounidense Donald Trump como un «cambio de juego», rápidamente fue objeto de escrutinio por parte de sus oponentes políticos.
Según un informe publicado el domingo en el Telegraph, los pacientes de Covid-19 en el Hospital St. Bartholomew en Londres y el Hospital Royal Devon y Exeter están siendo tratados con hidroxicloroquina, un medicamento antipalúdico desarrollado por primera vez en la década de 1950.

«Barts Health NHS Trust ha convocado a un grupo clínico experto para considerar nuevos medicamentos en el tratamiento de Covid-19», dijo un portavoz del hospital de Londres al periódico, y agregó que un número selecto de pacientes han recibido hidroxicloroquina

Si las pruebas en Bart’s y Royal Devon son exitosas, la droga podría tener un uso generalizado en los hospitales del NHS en todo el Reino Unido.

Su efectividad es objeto de acalorados debates entre los científicos, y la evidencia a favor y en contra de su efectividad es hasta ahora «anecdótica», para citar al Dr. Anthony Fauci, el principal experto en enfermedades infecciosas del presidente Trump. Además, es uno de varios medicamentos existentes, incluidos los medicamentos contra el VIH y el Ébola, que actualmente muestran potencial en el tratamiento de Covid-19.

El apoyo de Trump a la droga ha hecho que el debate sobre la hidroxicloroquina sea político. Los Institutos Nacionales de Salud comenzaron a probar su efectividad el jueves, pero Trump ha abogado durante mucho tiempo por su uso, describiéndolo como un «cambio de juego» después de que los medios de comunicación recogieran un prometedor estudio del biólogo francés Didier Raoult el mes pasado. El presidente francés, Emmanuel Macron, se reunió recientemente con Raoult, en una reunión privada de tres horas que el personal de Macron dijo que era parte de un amplio proceso de consulta.

Los opositores de Trump lo han criticado por respaldar un tratamiento no probado. Aunque la hidroxicloroquina ha sido aprobada por la Administración de Drogas y Alimentos para los pacientes más desesperadamente enfermos, su prescripción a pacientes ambulatorios ha sido prohibida por el gobernador de Nevada Steve Sisolak (D) y el gobernador de Nueva York Andrew Cuomo (D). Mientras tanto, el gobernador de Michigan, Gretchen Whitmer (D), ha pedido a los farmacéuticos que no lo receten, en un intento por evitar el acaparamiento.

Los periódicos han hablado sobre sus posibles efectos secundarios, y varios saltaron sobre la historia de una pareja de Arizona que murió después de automedicarse con la droga, sin mencionar que la pareja había consumido limpiador de acuarios y no medicación real.

Si el ensayo británico determina que la hidroxicloroquina es efectiva, la demanda del medicamento podría dispararse. La patente del medicamento ha expirado, y varios fabricantes han aumentado la producción en los últimos días. Las empresas farmacéuticas Novartis, Mylan, Amneal y Teva se han comprometido a entregar o donar decenas de millones de tabletas a fines de abril.

India, donde se fabrica el 70 por ciento del suministro mundial de hidroxicloroquina, impuso una prohibición a la exportación de la droga el mes pasado, antes de aliviar parcialmente la restricción la semana pasada bajo la presión de Trump. Un envío del medicamento aterrizó en los Estados Unidos el sábado.

Todavía no existe una cura o vacuna comprobada para Covid-19. A nivel mundial, el virus ha infectado a 1.8 millones de personas y ha matado a más de 112,000.

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