Otro convoy militar estadounidense se vio obligado a retirarse de un área en la provincia de Hasakah, en el noreste de Siria, luego de que los residentes locales, en coordinación con las fuerzas gubernamentales, impidieron que las fuerzas extranjeras pasaran por la comunidad.
Fuentes locales, que solicitaron no ser identificadas, informaron que un convoy estadounidense de cinco vehículos blindados se vio obligado a dar la vuelta y regresar en la dirección de la que provenía el martes por la tarde después de que los locales de la aldea de Hamu y las tropas sirias bloquearon el camino y evitaron su movimiento No se reportaron heridos.
El 27 de marzo, los soldados del ejército sirio y los residentes locales enojados habían obligado a un convoy militar estadounidense a retirarse de la misma aldea.
Dos días antes, un convoy militar estadounidense se vio obligado a retirarse de un área en la misma provincia siria después de que las fuerzas del gobierno bloquearon su camino y grupos de residentes locales, molestos por su presencia en la región, arrojaron piedras a las tropas estadounidenses.
SANA informó en ese momento que los soldados del ejército sirio detuvieron el convoy estadounidense, que constaba de 11 vehículos blindados, mientras intentaba atravesar el pueblo de Hamu en el campo al-Qamishli de la provincia de Hasakah.
Los locales luego arrojaron piedras al convoy estadounidense y los obligaron a retirarse.
El 8 de marzo, las fuerzas gubernamentales bloquearon un convoy militar estadounidense de siete vehículos cerca de la aldea de Kuzelia, que se encuentra al oeste de la ciudad de Tal Tamr en la misma provincia siria.
Luego, los residentes locales arrojaron piedras al convoy estadounidense y maldijeron a los soldados, obligándolos a darse la vuelta y encontrar otra ruta.
Los habitantes de la aldea de Rumailan al-Basha, en la misma región siria, arrojaron piedras a las tropas estadounidenses mientras su convoy intentaba atravesar el área dos días antes.