En las afueras de Alepo encontraron una estación de policía con cámaras de tortura de los extremistas

(ARCHIVO)

El ejército sirio encontró en el pueblo de Urem, liberado de los extremistas, cerca de Alepo, una estación de policía con cámaras donde los terroristas torturaron a los detenidos.

Durante varios años, la aldea estuvo bajo el control de tres grupos extremistas diferentes, incluido el prohibido Jebhat al-Nusra en Rusia, y cada uno de ellos utilizó estas instalaciones con el mismo propósito, dicen los residentes locales. El sitio estaba ubicado en el antiguo edificio de la clínica veterinaria.

Según el agricultor Faisal Garaf, en los calabozos de su estación de policía, los terroristas sacaban confesiones de que él estaba trabajando para las fuerzas gubernamentales. Los extremistas prácticamente no alimentaron a los detenidos, solo los torturaron y humillaron. El ejército sirio encontró documentos dispersos, algunos de los cuales los extremistas quemaron antes de retirarse.

Los terroristas destruyeron severamente el pueblo, incluso las ruinas de un antiguo templo cristiano del período bizantino, en el que los turistas solían visitar en el período anterior a la guerra. Los bandidos cavaron enormes agujeros en un intento de encontrar oro y joyas, supuestamente amuralladas en los cimientos. Los residentes locales dicen que los extremistas querían hacer estallar el monumento en sí durante la retirada, pero no tenían tiempo, al igual que su puesto de primeros auxilios.

Ahora los refugiados están regresando a la aldea. «Antes de la guerra, era tranquilo y bueno aquí, todos vivían en paz y armonía, todo estaba en tiendas a bajo precio, había trabajo, se podía alimentar a una familia», recuerda Muhammad Barakad, quien llegó a casa con su familia ocho años después. «Cuando llegaron aquí los extremistas, nos fuimos, ahora hemos regresado. Pero aunque hay pocas personas aquí, las condiciones de vida son difíciles».

Su esposa dice que la familia se vio obligada a irse al Líbano, y ahora, hasta que la casa en Urem haya sido restaurada, se ha detenido temporalmente en Alepo. «Vinimos a ver qué pasó con nuestra casa. Es bueno que las paredes permanecieran y el techo, no es necesario reconstruirla. Simplemente compraré muebles nuevos y se podrá vivir. Hasta que finalmente decidimos mudarnos, esperaremos hasta que la luz y el agua lleguen aquí», explicó Om Ali Barakad.

Sobre la restauración de Siria

Según el Centro ruso para la reconciliación de las partes beligerantes y el control del movimiento de refugiados, recientemente se han restaurado cientos de instituciones educativas y médicas en Siria, más de 1,2 mil km de carreteras, más de 14 mil empresas industriales han sido reparadas. Actualmente, la reconstrucción y reparación de 2.7 mil edificios residenciales, cientos de escuelas, instalaciones preescolares y médicas, y 90 edificios religiosos están en marcha en 345 poblados.

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