El mayor petrolero de Rusia, Rosneft, firmó un acuerdo para cesar las operaciones en Venezuela y vendió sus activos en el país al gobierno ruso, representado por una compañía no identificada. La medida podría tratar de frenar las sanciones de Estados Unidos en medio de las crecientes tensiones entre Rusia, Washington y Venezuela, y la actual crisis económica mundial.
Se esperaba la decisión de la compañía de cesar las operaciones en Venezuela, dijo el vocero de Rosneft, Mikhail Leontyev, a Vedomosti: «Nosotros, como compañía pública internacional, debemos proteger a nuestros accionistas. Lo hicimos en su interés».
Rosneftegaz puede ser el comprador o una de las partes del acuerdo, según los expertos entrevistados por Vedomosti. La compañía es 100% propiedad del gobierno ruso, y esta es la única compañía estatal que puede pagar con las acciones de Rosneft. Sin embargo, el riesgo de sanciones permanece en este caso, ya que el el jefe ejecutivo de Rosneft, Igor Sechin, también es Presidente de la Junta de Directores de Rosneftegaz, dijo al periódico el Analista Senior de BCS Prime, Sergey Suverov. Por lo tanto, el comprador podría ser otra empresa estatal, no afiliada a Rosneft.
Venezuela tiene la mayor base de recursos de hidrocarburos del mundo y Rosneft estaba muy interesado en los proyectos en este país, agregó Suverov. «Sin embargo, bajo la presión de las sanciones, los posibles riesgos para la empresa que cotiza en Londres y que tiene alrededor del 50% del capital de los inversores extranjeros superan los beneficios potenciales de hacer negocios en la región», dijo a Vedomosti.
El negocio principal de Rosneft se encuentra en Rusia, los activos en Venezuela no tienen un gran valor en este momento debido a la crisis política y económica y las sanciones de Estados Unidos, dijo el analista de Fitch, Dimitri Marinchenko al periódico. Él cree que debido a una fuerte caída en los precios del petróleo, la situación en Venezuela solo empeorará y la producción allí continuará cayendo.