Los fieles rezaban cerca del Domo de la Roca y afuera de la mezquita al-Aqsa en Jerusalén el viernes, ya que el acceso había sido restringido debido a la pandemia de coronavirus.
La policía vigilaba la entrada a la Ciudad Vieja en la Puerta de Damasco para limitar el número de fieles. Se produce cuando el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, impuso fuertes restricciones al tránsito.
Según funcionarios israelíes, actualmente hay 705 casos de coronavirus, y diez de los pacientes se encuentran en estado grave. Las autoridades palestinas han confirmado 48 casos en la Cisjordania ocupada hasta el momento.