Después de tres días de tensas negociaciones en Los Ángeles, Corea del Sur y los Estados Unidos no pudieron resolver las diferencias sobre el tema de compartir los costos de desplegar tropas estadounidenses en la Península Coreana. Esto fue anunciado el viernes por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Corea del Sur.
Según el Ministerio de Relaciones Exteriores, los jefes de delegación, Jong Eun Bo y James Dehart, acordaron continuar las consultas para minimizar las consecuencias negativas de la falta de un acuerdo. Las partes señalaron la necesidad de lograr rápidamente acuerdos mutuamente aceptables.
Si no se negocia con un alto grado de probabilidad, los funcionarios surcoreanos de las bases militares estadounidenses serán enviados en abril con licencia no remunerada. La parte estadounidense ha advertido repetidamente que, en ausencia de un acuerdo, es imposible resolver el problema de la nómina.
En camino a las negociaciones, los representantes de Corea del Sur esperaban discutir este tema por separado del acuerdo principal. Sin embargo, el Departamento de Estado mantuvo su posición anterior sobre la necesidad de una discusión exhaustiva de todos los temas relacionados con la defensa conjunta. No se ha establecido una fecha para la próxima ronda de negociaciones.