Las duras medidas para prevenir la propagación del coronavirus no han afectado a las unidades e instalaciones del Ministerio de Defensa ruso. Las tropas en Alabino, cerca de Moscú, continúan preparándose para el desfile que marca el 75° aniversario de la Victoria de la URSS en la Gran Guerra Patria, escribe Nezavisimaya Gazeta citando fuentes militares.
Más de 10.000 militares están actualmente involucrados en el esfuerzo a pesar de la prohibición de eventos masivos al aire libre en la Región de Moscú y en la propia capital rusa.
El Ministerio de Defensa informa que la Flota del Báltico ha enviado más de 500 infantes de marina a Moscú para prepararse para la marcha del 9 de mayo. Unos 1.000 cadetes de la Academia Militar de Fuerzas de Misiles Estratégicos se están preparando para el desfile. Más de 450 paracaidistas de Kostroma también llegarán a Moscú para participar en el desfile. Serán acomodados y entrenarán cerca del campo de tiro de Alabino en una plataforma especial que emula la Plaza Roja.
La escala de este entrenamiento muestra que el desfile del Día de la Victoria involucrará a más de 15.000 efectivos de tropas y 375 equipos, escribe el periódico.
Mientras tanto, los activistas públicos y los padres de los cadetes han expresado su preocupación de que estos preparativos, que se están llevando a cabo en medio de la amenaza del coronavirus, podrían afectar la salud de los participantes.
Sin embargo, un médico militar aseguró al periódico que «no habría una ruptura de COVID-19 en el ejército y la flota», subrayando que «la medicina militar sigue siendo fuerte en Rusia». Rusia también podría adoptar la experiencia de China, Italia y Francia en la lucha contra el coronavirus. Las unidades médicas de Rusia podrían ayudar a la Guardia Nacional a garantizar el toque de queda en las grandes ciudades para prevenir la propagación de la enfermedad, explicó.