El 15 de marzo, el Secretario de Estado de los Estados Unidos, Mike Pompeo, felicitó al pueblo sirio por comenzar sus «protestas pacíficas» hace nueve años.
Pompeo felicitó a Siria por el comienzo de una tragedia de 9 años y que aún continúa.
Inmediatamente recibió una respuesta muy adecuada.
Las «protestas pacíficas desde el principio», que vieron a 120 y más fuerzas de seguridad asesinadas, entre otros temas, muestran cómo comenzó todo.
Si el «régimen sangriento de Assad» no demostrara ser tan resistente como parece, todo el territorio sirio estaría en un estado de caos constante, bajo una amenaza terrorista, con el ISIS y Hay’at Tahrir al-Sham, entre muchos otros grupos extremistas que intentan consolidar el poder sobre una parte más grande del país. No habría un estado real, de manera similar a lo que estaba sucediendo en Libia cuando ganó la «revolución» y las fuerzas del mariscal de campo Khalifa Haftar están intentando revertir los resultados.
Mientras tanto, en el noveno aniversario del comienzo de los intentos de Estados Unidos de llevar a cabo un cambio de régimen en Siria, Rusia y Turquía comenzaron sus patrullas conjuntas a lo largo de la autopista M4.
El Ministerio de Defensa de Rusia dijo que Turquía y Rusia llevaron a cabo su primera misión de patrulla conjunta a lo largo de la autopista M4, y agregó que «la ruta de las patrullas se acortó» después de que los terroristas utilizaron mujeres y niños para bloquear el camino.
Ankara ha recibido tiempo adicional para garantizar la seguridad de las tropas que participan en patrullas conjuntas, dijo el Ministerio de Defensa ruso.
Los «activistas de la oposición» sirios dijeron que los residentes bloquearon la carretera con neumáticos en llamas cerca de la aldea de Nairab, en el extremo sur de Idlib, en rechazo a las patrullas de las «fuerzas de ocupación rusas».
El 14 de marzo, las oficinas de Idlib del grupo humanitario de la Media Luna Roja Árabe Siria fueron saqueadas por el grupo terrorista Hayat Tahrir al-Sham, vinculado a Al Qaeda.
Las Naciones Unidas y el Comité Internacional de la Cruz Roja condenaron la toma de posesión de las oficinas, diciendo que los artículos fueron robados o destruidos mientras los miembros de la Media Luna Roja fueron detenidos y hostigados.
Los «activistas» en Idlib citaron una declaración del llamado “Gobierno de Salvación”, un brazo de los terroristas de Hayat Tahrir al-Sham, diciendo que el movimiento contra la Media Luna Roja se debió a la supuesta corrupción entre sus miembros.