El martes, el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó por unanimidad una resolución en apoyo de un acuerdo de paz entre Estados Unidos y el movimiento radical talibán (prohibido en Rusia), así como con la posibilidad de revisar las sanciones contra el país.
«[El Consejo de Seguridad] acoge con beneplácito los pasos significativos para poner fin a la guerra y hacer posibles las negociaciones inter afganas mediante la adopción de la Declaración conjunta del IRA [República Islámica del Irán] y los Estados Unidos sobre la paz en Afganistán y el Acuerdo de paz en Afganistán entre Estados Unidos y los talibanes”,-se señaló en el texto de la resolución. También se refiere a la disposición del Consejo con el inicio de las negociaciones dentro de Afganistán para considerar la posibilidad de «revisar el estado de las personas, grupos y empresas incluidas en las listas sanciones del Consejo de Seguridad de la ONU”.
«Este paso [la firma del acuerdo] nos da la esperanza de lo mejor, pero esto es solo el comienzo», dijo Charity Norman Chalet, Representante Permanente Adjunto de Estados Unidos ante las Naciones Unidas. Prometió que Estados Unidos continuará los esfuerzos para lograr la estabilidad en Afganistán. «Esperamos que nos acompañen», dirigiéndose a sus colegas en el Consejo de Seguridad.
La Representante Permanente británica, Karen Pierce calificó el acuerdo entre Estados Unidos y los talibanes como «un paso significativo hacia la paz en Afganistán». Al igual que su homólogo estadounidense, advirtió contra «crear estructuras de poder paralelas en Afganistán».
Rusia por el diálogo y la revisión de las sanciones
El Representante Permanente de Rusia ante la ONU, Vasily Nebenzya, también expresó su apoyo al acuerdo. «En la agenda está el inicio temprano de negociaciones interafganas», dijo. Una de las condiciones para estabilizar la situación en Afganistán, Nebenzya llamó «una revisión de las sanciones del Consejo de Seguridad a Afganistán».
Nebenzya pidió una pronta reconciliación de las partes, al tiempo que señaló que «el camino hacia ellas será difícil y requerirá la consolidación de esfuerzos no solo de los propios afganos, sino también de la asistencia de socios regionales e internacionales». El diplomático también recordó que las negociaciones con la participación de las partes afganas en Moscú hicieron una gran contribución para resolver el conflicto y construir un diálogo directo entre afganos.
El 29 de febrero, en Doha, Estados Unidos y los talibanes firmaron un acuerdo de paz. Según los acuerdos, Estados Unidos, sus aliados y la coalición tienen la intención de retirar todas las tropas de Afganistán dentro de 14 meses. Los talibanes, a su vez, garantizan no utilizar el territorio de Afganistán para acciones que representen una amenaza para la seguridad de los Estados Unidos y sus aliados. Antes del comienzo de las negociaciones entre afganos, se debería liberar a unos 5.000 simpatizantes del movimiento y hasta mil personas detenidas por los talibanes como medidas de fomento de la confianza.