Las fuerzas de Erdogan continúan su sangrienta batalla por la paz y la prosperidad de los grupos terroristas de al-Qaeda en la región siria del Gran Idlib.
El 3 de marzo, Turquía derribó un avión de combate L-39 de la Fuerza Aérea Siria en el este de Idlib. El avión de guerra, que estaba llevando a cabo ataques contra terroristas de al-Qaeda, se estrelló cerca de la ciudad de Maarat al-Numan. Uno de los pilotos expulsados aterrizó en el área controlada por terroristas y fue asesinado. El mismo día, los medios de comunicación turcos publicaron videos que muestran ataques con aviones no tripulados en el convoy del ejército sirio que supuestamente se mueve cerca de Maarat al-Numan y la destrucción de un supuesto sistema de defensa aérea Pantsir de las Fuerzas de Defensa Aérea siria cerca de Saraqib.
Además, una gran columna militar turca que consta de vehículos blindados M113 y ACV-15, tanques de batalla Leopard 2A4 y sistemas de defensa aérea ALTIGNAN entraron en la aldea Batbu en la parte norte de Idlib. Fuentes pro-turcas también afirmaron que el ejército turco pronto desplegará los sistemas de defensa aérea Hisar en la región para poner fin a la constante agresión del poder aéreo sirio y ruso contra miembros pacíficos de al-Qaeda y sus seguidores turcos. Hasta ahora, los miembros de al Qaeda y el ejército turco están en una «retirada táctica».
En el este de Idlib, las fuerzas de Erdogan perdieron las aldeas de Jawbas, Tarnaba, Dadikh y Kafr Battikh al oeste de Saraqib. Las unidades del ejército sirio también avanzaron en la ciudad de Afirs con el objetivo de asegurar completamente el área de cruce M4-M5. En el sur de Idlib, los sirios limpiaron las aldeas Kafr Mus, Kawkabah, Amqiyah y Fulayfil de las fuerzas dirigidas por Turquía. Además de esto, el ejército sirio derribó 3 UAV de combate turcos. Uno de ellos, el Bayraktar TB2 se estrelló cerca de Saraqib. Según fuentes progubernamentales, más de 150 militantes fueron asesinados o heridos en enfrentamientos recientes con el ejército sirio. Teniendo en cuenta la escala de los enfrentamientos en el terreno, es probable que este número se sobreestime.
Sin embargo, tales afirmaciones son una sombra débil de las declaraciones del Ministerio de Defensa turco que está «neutralizando» a miles de soldados sirios y cientos de piezas de equipo militar en sus declaraciones de manera regular.
En la mañana del 3 de marzo, el ejército turco afirmó que durante las últimas 24 horas las fuerzas dirigidas por Turquía habían destruido un avión de combate, un UAV, 6 tanques de batalla, 5 obuses y piezas de artillería, 2 sistemas de defensa aérea, 3 vehículos blindados de combate, 5 camionetas armadas, 6 vehículos militares y un depósito de municiones pertenecientes a las fuerzas sirias. El ministerio de defensa también afirmó que 327 soldados sirios fueron «neutralizados» durante el mismo período.
En la noche del mismo día, cuando las fuerzas de Erdogan se retiraron de otro grupo de posiciones, un soldado turco murió y otros 9 resultaron heridos, por lo que el ministerio de defensa hizo otra ofensiva en Twitter para compensar los contratiempos. Dijo que 299 soldados sirios fueron «neutralizados», y 9 tanques de batalla, 8 piezas de artillería y sistemas de cohetes y 2 vehículos militares fueron destruidos recientemente. Por lo tanto, el número de soldados sirios «neutralizados» reclamados por Turquía desde el comienzo de la Operación Piece Spring acaba de llegar a 3.183. No importa si el ejército turco anuncia que sus fuerzas destruyeron un grupo de ataque de portaaviones sirio ‘Al-Assad’ cerca de Tartus o derribaron una docena de aviones de combate Su-50 suministrados por Rusia o incluso neutralizaron un destacamento de Rembos iraní, el el resultado será el mismo: las invencibles fuerzas turcas no obtienen ganancias en el terreno.
Mientras tanto, Moscú anunció una vez más que Rusia no planea cesar los esfuerzos antiterroristas en la región de Idlib y calificó de falsas las afirmaciones turcas sobre «millones» de refugiados que huyen de la operación antiterrorista siria en Idlib.