Los fiscales venezolanos detuvieron el martes al presidente de la filial de la corporación estatal de petróleo y gas de PDVSA, Oscar Aponte por sospecha de malversación y exportación ilegal de materiales estratégicos.
«Oscar Rafael Aponte Landaerta, presidente de Aceites y Solventes Venezolanos SA (VASSA), fue detenido el martes por cargos de malversación de materiales estratégicos: lubricantes, aceites y ácido sulfónico», dijo la agencia de noticias venezolana en un comunicado.
Según la opinión del fiscal, en el ejercicio de sus funciones oficiales, Aponte Landaerta redirigió materiales estratégicos a otros estados del país y luego los introdujo de contrabando en el extranjero, ocultando actos delictivos mediante la manipulación de los sistemas informáticos de la empresa, concluyó contratos con precios inflados y usó la propiedad de la empresa para sus propios fines comerciales y con fines de lucro para terceros
El 20 de febrero, en medio de sanciones más severas del Tesoro de los Estados Unidos contra las contrapartes comerciales de la compañía petrolera venezolana, el presidente Nicolás Maduro declaró el estado de emergencia y comenzó la reforma en la industria. La comisión de reestructuración de la compañía fue dirigida por el vicepresidente venezolano de economía, Tarek Al Aissami.
Funcionarios de inteligencia venezolanos arrestaron a dos gerentes de suministro y comercio de PDVSA el 28 de febrero. Según la comisión presidencial para la reorganización de la industria petrolera, los gerentes pasaron información estratégica sensible al gobierno de los Estados Unidos, lo que tuvo la oportunidad de dañar la industria petrolera venezolana.
El 29 de febrero, se supo acerca de cambios serios en el liderazgo de PDVSA: el decreto presidencial nombró nuevos vicepresidentes de la compañía para exploración y producción, procesamiento, comercio y suministro, finanzas y personal.