Estados Unidos ha estado llevando a cabo una campaña contra el gigante tecnológico chino, que acusa de ayudar a Beijing a espiar a sus clientes, desde el año pasado, limitando las ventas de las empresas estadounidenses a Huawei y presionando a los países extranjeros para que abandonen sus equipos para redes 5G.
Las agencias del gobierno de Estados Unidos celebraron una reunión la semana pasada para discutir propuestas de nuevas medidas restrictivas sobre las exportaciones a China, informó Reuters citando fuentes anónimas. Según los informes, estas propuestas incluían restringir las ventas de chips a los motores a reacción de Huawei y General Electric al fabricante aeroespacial Comac que construye aviones de pasajeros chinos C919.
Según Reuters, no todas estas propuestas encontraron apoyo con el presidente Donald Trump, quien se opuso a las medidas contra las exportaciones de motores a reacción. Al mismo tiempo, la idea de prohibir la exportación de chips, un componente crucial de los dispositivos Huawei, supuestamente aún permanece sobre la mesa en un intento por frenar las posiciones de la compañía en los mercados globales.
El informe llega inmediatamente después de los comentarios de Trump de que los compradores extranjeros de chips y otros productos hechos en Estados Unidos no deberían enfrentar dificultades debido al abuso de la tarjeta de «preocupaciones de seguridad nacional». Sin embargo, no dio detalles sobre si significa que Huawei podrá comprar productos estadounidenses que no pongan en peligro la seguridad nacional del país.
«Quiero decir, se colocan cosas en mi escritorio que no tienen nada que ver con la seguridad nacional, incluidos los fabricantes de chips y otros», dijo Trump.
Washington inició su campaña contra Huawei el año pasado, orquestando el arresto de su principal oficial financiero en Canadá, Meng Wanzhou, prohibiendo a las compañías estadounidenses trabajar con el gigante tecnológico chino y presionando a los países extranjeros, incluso tratando de chantajear a los aliados, para prohibir a Huawei su 5G redes. Estados Unidos afirma que Huawei instala puertas traseras en sus equipos para permitir que Beijing espíe libremente a sus clientes.
Tanto el gobierno chino como el titán tecnológico niegan las acusaciones de Washington y condenaron duramente sus acciones contra Huawei. La compañía prometió demandar a la Casa Blanca por sus políticas y, mientras tanto, ha decidido reemplazar las piezas y el software estadounidenses con alternativas, incluidos los artículos producidos en el país.
La campaña de Washington para expulsar a Huawei de las redes 5G no ha tenido éxito, ya que solo unos pocos países prohibieron la compañía. El Reino Unido, uno de los aliados clave de los EE. UU., Permitió el equipo de Huawei en partes no centrales y no sensibles de sus redes 5G