La sede de crisis del Ministerio de Salud de Croacia en relación con la rápida propagación de un nuevo tipo de coronavirus, incluso en Europa, decidió reforzar el control en la frontera con Italia para detectar oportunamente los casos de penetración de la enfermedad en la república. Esto fue informado por la agencia estatal de noticias HINA.
El régimen de control fronterizo de control especial prevé un examen exhaustivo de los ciudadanos que llegan principalmente de las regiones italianas de Véneto y Lombardía, así como de los turistas que han visitado China y Corea del Sur, para detectar posibles síntomas que indiquen su infección por el coronavirus. «La sede de la crisis tiene dos objetivos: prevenir la propagación de la enfermedad a Croacia y, si la enfermedad aún ingresa al territorio del país, aislar a los infectados y a todos los que se contactaron con ellos lo antes posible para contrarrestar rápidamente la propagación de la enfermedad en el país», dijo el ministro de Salud de Croacia, Willy Berosh.
Como parte de las medidas tomadas, la policía fronteriza croata entrevistará a todos los ciudadanos que lleguen desde la vecina Italia y otros países donde observe la propagación de la enfermedad, y averiguará dónde se fueron y a dónde fueron enviados, así como su estado de salud. Está previsto utilizar termómetros infrarrojos para verificar la temperatura corporal.
La sede de crisis de Croacia se formó por iniciativa del Ministerio de Salud. Incluye especialistas del Instituto Croata de Salud Pública, el departamento nacional de medicina de emergencia, la inspección sanitaria, así como oficiales de la policía de fronteras y la agencia de transporte aéreo.
Según datos oficiales, no se encontraron rastros de un nuevo tipo de coronavirus en Croacia. Recientemente, se informaron 10 casos de ciudadanos que contactaban a instituciones médicas con sospecha de neumonía, pero los resultados de las pruebas y exámenes no confirmaron la presencia del virus peligroso.